La Diputación malagueña se compromete a asumir el convenio del que se descolgó el Consistorio

La Diputación malagueña asumirá hoy el compromiso de continuar la construcción y adaptación de centros educativos para acabar con la paralización que se produce en la capital como consecuencia de la decisión del Ayuntamiento de descolgarse del convenio Aula 2000, por el cual los municipios anticipan esas infraestructuras. La moción, que se debatirá en el pleno convocado para esta mañana, está avalada por el equipo de gobierno provincial (PSOE, IU y PA) y propone a la Consejería de Educación la firma de un acuerdo para retomar esas obras. La propuesta parte de un reconocimiento al esfuerzo hecho por las administraciones autonómica y local -que permitió la construcción de 36 centros y la adaptación de otros 125- pero a continuación reprueba "la salida unilateral" del consistorio: "Esta iniciativa, ejemplo claro de lo que debe ser la colaboración entre administraciones, ha sido quebrada por el Ayuntamiento de Málaga sin que existan razones objetivas que justifiquen la falta de colaboración con la consejería".

Para el delegado de Educación, José Nieto, la propuesta de la Diputación "resuelve un problema generado por la falta de sensibilidad" del consistorio. "En su decisión subyace la consideración de que la educación como servicio público no es una prioridad para el Ayuntamiento", criticó. El camino que se abre ahora llevará algunos meses. La Diputación debe trasladar el acuerdo a la Consejería, ambas administraciones tienen que consensuar un convenio, una comisión técnica hará un inventario de los trabajos pendientes y, por último, la institución supramunicipal dará luz verde al documento. La Diputación sostiene que su propuesta no supondrá endeudamiento porque pagará las obras a medida que reciba fondos de la consejería.

Ante la decisión de Diputación, la concejala de Educación, Ana Rico, insistió en que la decisión del consistorio no obedece a una falta de voluntad sino a la imposibilidad de superar los topes de endeudamiento. Según sus datos, la Consejería les adeuda 3.640.639 euros que no cobrarán hasta 2006. Rico apuntó que no se ha hecho una valoración del futuro convenio por lo que puede ser "un documento de buenas intenciones que no se pueda ejecutar". La edil también reprochó a Educación que, tras los 9 millones de euros iniciales del Aula 2000, "siguió colgando de la percha de ese convenio todo lo que tenía que hacer en la capital", por un montante añadido de 15 millones de euros.