Un hombre secuestra, encadena y viola a su ex mujer en Girona

Un juzgado de Girona ha ordenado el ingreso en prisión sin fianza de Rafael M. H., de 55 años, acusado de secuestrar, encadenar y violar a su ex mujer. La mujer, después de un cautiverio de 10 horas, fue liberada por los Mossos d'Esquadra. Los agentes iniciaron la búsqueda tras recibir una llamada desde el lugar de trabajo de la mujer, que había alertado a sus compañeros del peligro que corría.

Tras varios meses de separación, Rafael M. H. llamó a su ex compañera ofreciéndose a devolverle algunas pertenencias que ésta había dejado en el domicilio que compartían cuando lo abandonó. La mujer, según fuentes próximas al caso, era reacia a este encuentro y temía una reacción agresiva de su antigua pareja. Durante la convivencia conyugal había incluso denunciado agresiones físicas.

Pese a ello, aceptó una cita ante la aparente actitud conciliadora mostrada por su antigua pareja. Pero, tras pasar por la vivienda, el agresor, siempre según las primeras versiones, la condujo hasta una barraca ubicada en el barrio de Torre Gironella, una zona con huertas y construcciones provisionales situada en las afueras de Girona, asegurándole que allí guardaba el resto de sus pertenencias. Una vez en ese lugar apartado, la encadenó fuertemente a una cama y, apuntándole a la cabeza con una pistola simulada, la violó repetidamente, según explicó la mujer tras ser rescatada. La alarma policial, sin embargo, había saltado a las 16,00 horas, cuando la mujer no acudió a su puesto de trabajo. Ella misma había comunicado a su jefe que al mediodía acudiría a una cita con su ex pareja y, como se sentía intranquila, le pidió que si no regresaba al trabajo por la tarde avisara inmediatamente a los Mossos d'Esquadra.

Antecedentes

La policía autonómica dio inmediata credibilidad al aviso tras comprobar que Rafael M. H. tenía antecedentes por robo, amenazas y lesiones. Los agentes se trasladaron al piso del agresor y lo encontraron vacío. No fue hasta última hora de la noche cuando, tras buscarle por los bares que solía frecuentar, la policía tuvo noticia de la existencia de la cabaña de Torre Gironella.

Los agentes iniciaron una batida por la zona, escasamente poblada, hasta dar con la única barraca que parecía habitada. Ante el temor de que el sospechoso pudiera utilizar algún arma, dado que era aficionado a la caza, rodearan el habitáculo a distancia y conminaron a Rafael M. H. a salir.

El agresor, según las primeras versiones, se aprestó a desatar a su víctima al sentirse acosado, pero fue arrestado en cuanto abrió la puerta de la cabaña. En el interior, la policía encontró a la mujer, aterrorizada y en un estado deplorable, con lesiones en las muñecas y el cuello originadas por la presión de las cadenas con las que había permanecido durante horas atada a la cama. La víctima explicó que había llegado a temer por su vida y que dio credibilidad a la amenaza de su agresor de matarla de un tiro en la cabeza.

La mujer fue trasladada inmediatamente al hospital Josep Trueta de Girona para curarle sus lesiones y someterla a una revisión forense. El Juzgado de Instrucción número 2 de Girona ha ordenado la cárcel sin fianza para el agresor.