ACS se fusionará con Dragados a final de año para crear el mayor grupo constructor

El grupo ACS ha fijado ya plazos para su fusión con Dragados, en la que controla el 23,5%. La empresa que preside Florentino Pérez prevé concluirla a final de este año, o a principios de 2004, para crear la primera constructora española. ACS prevé la constitución de un holding en el que la empresa constructora se mantenga con la denominación de Dragados. ACS, que tiene previsto mantener el mecanismo de blindaje en la actual Dragados con limite del derecho de voto al 25%, ha recurrido la sanción de un millón de euros impuesta por Competencia por no haber notificado previamente la compra del 23,5% al SCH.

ACS ha anunciado formalmente sus planes de fusión con Dragados. Cuando compró en abril pasado al SCH una participación de control del 23,5%, los mercados ya intuían que el siguiente paso lógico sería la integración, pero los nuevos accionistas de referencia puntualizaron entonces que ése no era su propósito. Ahora, con el ambiente en el sector muy caldeado por el temor a ofertas hostiles -como la que está sufriendo la inmobiliaria Bami, cuya participada Metrovacesa es objeto de una OPA no deseada de dos inversores italianos-, los grupos refuerzan sus posiciones en un intento por proteger sus participaciones.

Dos semanas después de que Vallehermoso, la primera inmobilaria española, y la constructora Sacyr aprobaran su fusión, ACS mueve ficha. Los primeros detalles de la fusión con Dragados se conocieron ayer a través del folleto en el que ACS explica las condiciones de la OPA que acaba de lanzar por otro 10% de Dragados (a 22,22 euros por acción) para aumentar su participación hasta el 33,5%. Este folleto está disponible en la Comisión Nacional del Mercado de Valores, que la semana pasada autorizó esta OPA.

Fondos hostiles

Una de las razones para esta operación es reforzar la posición de ACS en Dragados ante los "persistentes rumores sobre el posible lanzamiento por un tercero de una OPA", indica ACS en el documento. No en vano, varios fondos de inversión de alto riesgo (hedge funds) habían alcanzado un porcentaje del 30% en el capital de Dragados y de hasta el 20% en ACS (ahora mantienen en torno al 12%) con el fin de poder servir las apetencias de un mejor postor. Estos fondos funcionan mediante la toma temporal de acciones mediante préstamo de pequeños accionistas a cambio de una alta rentabilidad.

No obstante, esta participación del 33,5% sólo permitirá a ACS elevar sus derechos de voto desde el 23,5% al 25%, que es el límite establecido por los estatutos de Dragados. La compañía adoptó estos mecanismos de blindaje, precisamente para tratar de evitar ofertas hostiles, en su última junta general de accionistas, que se reunió el mismo día que se hizo efectiva la toma de control de ACS en abril pasado. Esta operación se acordó con el SCH a espaldas del entonces presidente de Dragados, Santiago Foncillas.

De esta forma, ACS mantendrá el número de consejeros en su participada: cuatro representantes de un total de nueve (el resto son dos del SCH, otros dos independientes y el presidente ejecutivo de Dragados).

Para concretar la fusión ACS y Dragados (principalmente, para fijar la relación de canje) encargarán a dos bancos de negocios un informe preeliminar. El calendario fijado por ACS establece que, tras la aprobación del proyecto de integración por parte de los consejos de administración y las juntas de accionistas, la fusión se materialice a final de este año o, a más tardar, "en los primeros meses de 2004". Los analistas calculan que el canje podría rondar dos acciones de Dragados por una de ACS, cuyos principales accionistas son el grupo March (22,34%); Florentino Pérez, (10%) y Alberto Cortina y Alberto Alcocer (los Albertos) junto al Banco Zaragozano (10%).

La nueva compañía, que sumará un valor bursátil superior a los 5.000 millones de euros, se convertirá en la primera firma española del sector, por delante de FCC, y la tercera europea, con una facturación conjunta de 9.037 millones en 2001. Dragados se ha revalorizado un 28% desde abril de 2002 y ACS un 3%.

Respecto a la OPA, el folleto indica que ACS "no tiene intención de proponer la exclusión de cotización de las acciones de grupo Dragados". La nueva empresa resultante mantendrá, con toda probabilidad, el nombre de la veterana constructora, pudiendo quedar el de ACS como denominación del holding del que dependerán también la la sociedad de servicios Cobra y las autopistas (Dragados participa en Aurea, en proceso de fusión con Acesa).

El Servicio de Defensa de la Competencia expedientó a ACS por no notificar la entrada en Dragados previamente. El Gobierno abrió un expediente a la compañía y, aunque la compra fue autorizada, ACS ha sido sancionada con un millón de euros, según consta en el mismo folleto explicativo de la OPA. La constructora ha recurrido por la vía contencioso-administrativa.

A la espera de que concluya la fusión, Dragados informó ayer, a través de un comunicado, de que ha firmado un contrato para construir en sus instalaciones de Puerto Real (Cádiz) una planta de tratamiento de gas natural para la petrolera noruega Statoil. El contrato está valorado en 250 millones de euros.