Un herido al desalojar Díaz Alperi del pleno a trabajadores de Sintel
La sesión plenaria del Ayuntamiento de Alicante registró ayer disturbios de orden público por segunda vez consecutiva. Casimiro González, un militante de Esquerra Unida (EU) que concurrió a las elecciones de 1999 en el número tres de la candidatura de esa formación, sufrió una fuerte hemorragia en un brazo tras ser desalojado de la sala por agentes de la policía local. El herido, enfermo renal, precisará cirujía plástica en el brazo, según EU.
Los hechos ocurrieron nada más comenzar la sesión. Una veintena de trabajadores de Sintel protestaba en la sala ante la negativa del gobierno local, con mayoría del PP, de someter al pleno una moción en apoyo de sus reivindicaciones presentada por EU. El alcalde, Luis Díaz Alperi, tras pedir a los trabajadores que guardaran silencio y advertirles de que los desalojaría si no cesaban sus protestas, ordenó a laPolicía Local que los sacaran del salón. Se produjo entonces un forcejeo entre los empleados y los agentes. El militante de EU fue agarrado del brazo por un policía y comenzó a sangrar abundantemente.
La portavoz de EU, Camino Remiro, abandonó de inmediato la sesión para atender a su compañero en otra sala del Ayuntamiento. Una ambulancia trasladó al herido al Hospital General. Mientras Casimiro González era atendido, el portavoz del Grupo Socialista, Blas Bernal, interrumpió la sesión y dijo al alcalde: "hay una persona que está mal, que está tirando sangre por el comportamiento de algún miembro de la Policía Local". Luego instó a Díaz Alperi a que supendiera el pleno y se interesara por la salud del herido, que dejó un reguero de sangre en el Salón Azul del Palacio Municipal. El alcalde se limitó a preguntar si el herido estaba recibiendo ya atención médica y ordenó que siguiera la sesión.
El portavoz municipal del PP, Pedro Romero, convocó a los periodistas después del pleno para trasladar su versión del suceso. Tras enfatizar que el equipo de gobierno rechazaba "cualquier responsabilidad" en los disturbios, se cebó con el herido: "Una persona que está en esa situación de salud lo que menos le conviene es venir a un sitio sabiendo que, con la provocación que está llevando a cabo, lo único que puede conseguir es salir lesionado, por no ser una persona de salud normal".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.