Una grabación militar muestra daños en el ala izquierda del 'Columbia'
Un comité independiente se hace cargo de la investigación del desastre
Nuevas imágenes del último minuto del vuelo del Columbia confirman "serios daños estructurales" en el ala izquierda. A diferencia de otras grabaciones, ésta es de alta resolución y puede aportar datos cruciales sobre las causas del siniestro. Ya no será, sin embargo, la NASA la que determine cuáles fueron esas causas, sino un comité independiente que, debido a la presión de los demócratas, responderá directamente al presidente George W. Bush y al Congreso, en vez de al director de la agencia espacial.
Los daños en el ala izquierda -filmados desde la base de la fuerza aérea de Kirkland, en Nuevo México- refuerzan la hipótesis de que el daño causado por el desprendimiento en el despegue de un trozo del aislamiento térmico del depósito principal de combustible desencadenaron la desintegración del Columbia. Por esta última teoría apostaron en principio los ingenieros de la NASA, pero luego titubearon y decidieron partir desde cero. Las dudas han restado credibilidad a los investigadores, dado que fueron ellos mismos quienes descartaron el 27 de enero que el impacto en las losetas térmicas del material desprendido en el despegue supusiera un peligro para la vuelta a la Tierra del transbordador. Admitir ahora lo contrario sería reconocer un error mortal. Ron Dittemore, director del programa del transbordador, afirmó ayer que la investigación entraba en "una nueva fase". Nueva porque no excluye ninguna hipótesis, y porque va a analizar "tanto las causas como las decisiones de los directivos". Esta cláusula fue añadida ayer a petición de los congresistas demócratas que quieren que la investigación se realice como la del Challenger, en la que un comité independiente responsabilizó a algunos gestores de la NASA y al contratista que fabricó las piezas defectuosas.
En el caso del Columbia, no hay indicios por el momento de piezas defectuosas. Lo que sí admite la NASA son descuidos en la puesta a punto de las cámaras que debían haber registrado desde todos los ángulos el despegue del transbordador, y cuyas imágenes ahora serían de gran utilidad.
Dittemore dice que la "cámara más importante situada para filmar el lanzamiento el sábado pasado estaba desenfocada y las imágenes que tomó no sirven para nada". Y las imágenes de las otras cámaras tampoco son de calidad.
Las esperanzas están puestas en las imágenes captadas en la base aérea de Kirkland, con un telescopio de alta resolución capaz de identificar objetos de unos treinta centímetros a una distancia de 1.000 kilómetros. En las imágenes muestran un borde mellado en el ala izquierda cerca del fuselaje. También dejan ver a los motores del lado derecho intentando corregir la inestabilidad del vehículo. El borde mellado del ala izquierda indicaría que o bien se produjo una pequeña grieta o un desprendimiento.
Según la revista Aviation Week & Space Technology, otro factor importante radica en un posible fallo en la resistencia de las protecciones del borde frontal del ala izquierda (hechas de otro material y clavadas, en vez de pegadas).
La secuencia de fotos la están analizando desde ayer en el Centro de Control de la NASA en Houston.
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