Chaves e Ibarra dan por resuelto el conflicto del subsidio agrario tras una reunión con Zaplana

El conflicto del subsidio agrario, el único punto del decretazo que el Gobierno no ha rectificado aún, está a punto de resolverse. Los presidentes de Andalucía, Manuel Chaves, y de Extremadura, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, se mostraron seguros ayer de que esta batalla está cerca de su final tras reunirse con el ministro de Trabajo, Eduardo Zaplana, en Sevilla. Zaplana no llevó su propuesta por escrito, como se había comprometido. Según los presidentes socialistas, Zaplana aseguró que las nuevas prestaciones a los jornaleros tendrán carácter contributivo.

"Los derechos de los jornaleros parece que van a ser restituidos con un nuevo decreto", proclamó Ibarra tras la reunión que los dos presidentes socialistas mantuvieron con el titular de Trabajo en el Palacio de San Telmo, la sede de la presidencia de la Junta andaluza.

Esta cita, que empezó a las 19.00 y duró una hora, se convocó al mediodía a toda prisa y aunque Zaplana no llevó su propuesta definitiva por escrito, parece que sirvió para limar las últimas diferencias que separaban a los sindicatos y a las dos administraciones autonómicas con el Gobierno central, principalmente por la exigencia de que las prestaciones de los jornaleros den derecho a pensión.

Tras la reunión, Zaplana fue poco explícito acerca de su contenido, aunque aclaró que cada vez estaba "más optimista" sobre la posible solución de este conflicto y que el texto definitivo estaría redactado el próximo sábado. Una fuente de Trabajo especificó que la propuesta, como se había anunciado, incluye una prestación equivalente al subsidio agrario (el 75% del salario mínimo durante seis meses) para los jornaleros que se quedaron fuera del sistema, que tendrá carácter contributivo y generará derecho a pensión. Además de ligar el cobro de esta nueva prestación al seguimiento de programas de inserción laboral, se incorpora un nuevo requisito: habrá que probar diez años de residencia en Andalucía o Extremadura, condición que dificultará la entrada en el sistema de inmigrantes.

En una comparecencia posterior, tanto Chaves como Rodríguez Ibarra se manifestaron optimistas, aunque el presidente andaluz introdujo la cautela de que quería ver por "escrito" la "propuesta verbal" del ministerio.