Los valencianos menores de 18 años consumen el 17% del alcohol destilado que se vende

Los adolescentes menores de 18 años consumen el 17% del volumen total de bebidas destiladas que se vende en los establecimientos valencianos, lo que les convierte en "destinatarios de la publicidad de esta droga", según afirmó ayer el director general de Drogodependencias de la Generalitat, Bartolomé Pérez Gálvez, tras la inaugurar en Alicante la V Reunión Nacional de Drogodependencias. Los últimos informes indican que el consumo de cerveza entre los menores se sitúa en el 5 %, mientras que el de vino la cifra es del 0,6 %, frente al 75% de los alcoholes más fuertes.

El responsable en materia de drogodependencia lamentó que la publicidad de estas drogas incida "directamente en el menor de edad". Por este motivo dijo que hay que intentar eliminar el concepto de que el "consumo responsable y sensato es un placer y es beneficioso". El director general de Drogodependencias de la Generalitat destacó que el abuso del alcohol en menores "es conflictivo" ya que el 75% de esta droga que consume un joven valenciano procede de bebidas destiladas, como el whisky, vodka, ginebra, y no del vino o la cerveza. Por esta razón, Pérez Gálvez indicó que los publicistas "tienen que ser conscientes de la legislación que les afecta" y afirmó que "aunque hilen muy fino en cuanto a bordear la legislación, deben hacerlo dentro de la ética", agregó.

En cuanto a los datos de asistencia a drogodependientes de enero a octubre de 2002, las cifras reflejan que por cada 100 atendidos en las Unidades de Conductas Adictivas, el 4% eran alcohólicos, el 24% heroinómanos, el 21% cocainómanos y el resto fueron atendidos por adicción a otras sustancias.

De este análisis "se deduce" que el consumo de heroína ha descendido "radicalmente por primera vez", mientras que se nota un ascenso en la combinación de alcohol y cocaína, y se registra un mayor número de alcohólicos, con una media de edad de 41 años. Pérez Gálvez hizo estas declaraciones después de inaugurar la V Reunión Nacional de Drogodependencias, organizada por el Instituto de Investigación de Drogodependencias de la Universidad Miguel Hernández de Elche. En esta reunión, numerosos expertos en drogodependencias de todo el país y varios comisionados autonómicos analizarán la influencia de la publicidad en el consumo de drogas, centrándose sobre todo en el alcohol y el tabaco, con el objetivo de poner en común las diferentes actuaciones en esta materia en sus comunidades autónomas e intentar desarrollar políticas activas.

Por su lado, el consejero de Bienestar Social, Rafael Blasco, destacó la puesta en marcha de un plan que permitirá que las ciudades valencianas con más de 100.000 habitantes (Alicante, Elche, Castellón y Valencia) dispongan de un servicio de atención domiciliaria a personas drogodependientes que estén en el proceso de desintoxicación ambulatoria. La iniciativa se desarrollará con la colaboración de la Cruz Roja mediante convenio con Bienestar Social. De esta atención domiciliaria se beneficiarán alrededor de 3.000 personas y el objetivo es "complementar el trabajo que se realiza en la Unidades de Conductas Adictivas, lo que permitirá un tratamiento más personalizado y continuado centrado también en el ámbito de la convivencia familiar", dijo Blasco. El consejero también anunció la creación de talleres escolares específicos para formar a los 170.000 alumnos de secundaria en el análisis de la publicidad de estas sustancias. En su intervención, Blasco expuso las novedades legislativas que en materia de publicidad se han incorporado con la Ley 4/2002 sobre Drogodependencias y otros Trastornos Adictivos, que prohíbe la publicidad de bebidas alcohólicas y tabaco a menos de 200 metros de centros escolares, sociales y sanitarios.