El Gobierno considera "prioritaria" la creación de los foros de apoyo a amenazados
Imaz reconoce dificultades de los alcaldes por los "entornos de amenazas" que afrontan
El portavoz del Ejecutivo, Josu Jon Imaz, aseguró ayer que la constitución de los foros locales de apoyo a las personas amenazadas constituye "una tarea prioritaria". Esas plataformas deben servir como modo de hacer sentir a quienes viven en esa situación "el calor y la solidaridad" de su entorno más inmediato, el de sus propios pueblos. Imaz reconoció la existencia de dificultades para su puesta en marcha a causa de "los entornos de amenazas" que deben afrontar los alcaldes y concejales que abordan esa inicitiva y deseó que "en un futuro próximo" aumente su número.
Imaz reconoció la escasez de las iniciativas puestas en marcha al hacer votos para que los foros municipales de apoyo a los amenazados por ETA y su entorno vayan aumentando y se consoliden, lo que calificó de "tarea prioritaria para la sociedad vasca" con el objetivo de que los afectados sientan "más llevadera su ya dura situación".
"El Gobierno es consciente de las dificultades que pueden encontrar muchos alcaldes y concejales a la hora de poner en marcha una cosa que entendemos que es importante y que es necesaria", dijo el portavoz del Ejecutivo. Interrogado sobre el tipo de dificultades a que se refería, Imaz se explicó: "Cuando uno hace frente a los entornos de amenazas a las personas es indudable que hay dificultades". "Las dificultades objetivas están ahí, pero creemos que hay que seguir por ese camino", añadió.
Imaz no se refirió en ningún momento a la Ley de Partidos como elemento de quiebra en el proceso de constitución de esos foros, tal y como señaló a este periódico el presidente de Eudel, el peneuvista Karmelo Sáinz de la Maza.
El portavoz quiso apartar cualquier sospecha de desinterés político hacia la inicitiva: el Ejecutivo, afirmó, "no duda en absoluto ni de la voluntad y el compromiso de Eudel ni de la voluntad y el compromiso de la mayor parte de los municipios vascos a la hora de tomar medidas y tratar de hacer frente a la situación". Así, destacó la puesta en marcha de "algunas acciones", que calificó de "positivas", aunque "incipientes". "Queremos y creemos que esas acciones van a ir extendiéndose y se van a ir consolidando por los municipios de la geografía vasca", aseguró.
Desde las filas del PP, fuentes cercanas al alcalde de Vitoria, Alfonso Alonso, el representante del PP en la comisiòn ejecutiva de Eudel, señalaron que todavía no ven en los partidos nacionalistas una "voluntad de acción decidida más allá de las buenas palabras" y contrapusieron la definición de Imaz de los foros como "tarea prioritaria" con "el rechazo a todas las medidas que se proponen".
Foro de Convivencia
"La Declaración es importante, porque reconoce la realidad de la situación que vivimos y la importancia de dar un apoyo claro a los amenazados, pero faltan las actuaciones", dijeron las mismas fuentes, que reprochan a los nacionalistas su resistencia, también en los ayuntamientos, a "herramientas" como la Ley de Partidos o la reforma del Código Penal. El Ayuntamiento de Vitoria no ha puesto en marcha tampoco todavía el foro de apoyo a los amenazados comprometido con la firma del propio Alonso. Pero el consistorio sí ha dado pasos y tiene en marcha el llamado Foro de Convivencia Ciudadana, uno de los nacidos en el marco del debate sobre el Plan Estratégico de la ciudad, Vitoria 2010, precisamente porque el terrorismo y el deterioro de la convivencia fueron vistos como uno de los problemas a abordar. A juicio de Alonso, la línea de trabajo de ese foro coincide con la planteada en la Declaración por lo que no se haría necesaria otra plataforma nueva.
En otro orden de cosas, el portavoz del Gobierno vasco interpretó la ofensiva contra el terrorismo y la delincuencia anunciada por el presidente del Gobierno, central José María Aznar, como una demostración de su propio fracaso en materia de seguridad, y como un recurso propagandísitico para "tapar" otros problemas, como el del Prestige. Imaz se remitió a los datos de las memorias de la Fiscalía General del Estado: "Cuando Aznar fue investido presidente en 1996 había una tasa de 75 delitos por mil habitantes. Ahora es de 98,8". Ello supone, afirmó, que "hay más delincuencia en España desde que Aznar está en el Gobierno, porque se ha incrementado en un 30%".
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