ELA bloquea un informe del CES crítico con el programa Auzolan

El sindicato ELA paralizó el pasado jueves en el pleno del Consejo Económico y Social (CES) la aprobación de un dictamen que afirma que el programa Auzolan de inserción social "no resulta la respuesta adecuada o satisfactoria para las personas que se acogen" a él, según fuentes del CES. El dictamen considera Auzolan insuficiente, pese a "valorar positivamente la iniciativa" del Departamento de Justicia, Empleo y Seguridad Social en favor de la inserción. El programa, que está en su segundo año, sólo atendió en su primer año al 3,4% de los perceptores de la renta básica.

ELA pudo bloquear en la última fase la aprobación del dictamen crítico con el programa de inserción social porque es mayoritario en el bloque sindical y los informes deben contar con el consenso de todos los bloques representados en el pleno del CES. Al oponerse ELA, el asunto quedó sobre la mesa.

ELA frenó así un segundo varapalo del CES a una iniciativa social de la consejería que dirige Joseba Azkarraga. En junio recibió una dura crítica por el decreto de ayudas a la natalidad, que luego mejoró mínimamente para adaptarlo a alguna de las sugerencias del CES. Ahora se trata del programa Auzolan de inserción de los más desfavorecidos. Este programa nació en septiembre de 2000 y el CES tenía pendiente realizar un trabajo exhaustivo sobre el mismo. Así, aunque después de la publicación del decreto de actualización este año, se decidió a hacer un dictamen.

Dado que el CES no tenía problemas de plazos, ya que la normativa estaba en vigor, constituyó una comisión por donde han ido desfilando expertos en la materia. Los resultados de la comisión y la postura de los agentes sociales presentes en el CES están recogidas en el dictamen, que el sindicato mayoritario nacionalista ha paralizado.

Dotación "insuficiente"

En el informe aprobado en comisión, el CES valora positivamente las intenciones del plan, pero cree que la dotación "presupuestaria es a todas luces insuficiente". De hecho, se recogen los propios datos del Departamento de Empleo para constatarlo. De las 16.550 personas perceptoras de la renta básica en Euskadi, sólo 568 (el 3,4%) tomaron parte en Auzolan, y de éstas terminó el programa el 80%. El CES pide que se estudien los motivos de tan elevada tasa de abandono.

Si bien el CES considera que el empleo es un factor de integración social, como indica el Gobierno, considera que el programa Auzolan no clarifica nítidamente su objetivo. Aunque se define como de inserción, luego se redefine en la exposición de motivos como de preinserción, porque facilita un mecanismo para entrar en el mercado laboral. Entiende, por ello, el CES que se trata de "un primer paso en un proceso más largo". ELA rechazó apoyar el dictamen en el pleno al considerar excesivo decir que Auzolan es un programa de preinserción, no de inserción.

El CES también cree que es necesario definir el perfil de los beneficiarios. Considera que las personas que se pueden acoger, dentro de los perceptores de la renta básica y aquellos en riesgo de exclusión, son los que tienen una posible empleabilidad pero carecen de cualificación, así como los que tienen dificultades para acceder a un empleo por problemas de salud o discapacidades. Sin embargo, deben quedar fuera las de fácil empleabilidad y los que tengan las llamadas minusvalías sociales (enfermedades mentales, deterioro elevado,...). En este sentido se pide al Gobierno una mayor flexibilidad en el diseño del programa.

La misma flexibilidad se pide para los requisitos del programa, de forma que la entrada en el mercado laboral sea real. Se propone que la duración de los programas (seis meses) y la jornada de trabajo (30 horas) no sean rígidos, que se garantice la igualdad de oportunidades entre sexos y que la retribución salarial sea digna para no crear estigmas.