CLH anuncia su nueva planta de almacenaje en Santurtzi para mediados de 2006

La Compañía Logística de Hidrocarburos (CLH), la principal planta de almacenaje de combustible de Euskadi, dispondrá de su nueva planta junto al Puerto de Santurtzi a mediados de 2006, según los planes de la empresa. Este plazo supondrá más demoras en el desmantelamiento completo de las instalaciones de Muskiz -un área que debe recuperarse medioambientalmente y donde se han demolido cuatro de los 22 tanques existentes-, que se prolongaría hasta 2006, con cuatro años de retraso respecto a los establecido por el Ministerio de Medio Ambiente.

Responsables de CLH presentaron ayer el inicio de las obras de la nueva planta, que han comenzado esta misma semana. Dado que el futuro emplazamiento se encuentra en una fuerte pendiente, la compañía necesitará año y medio de obras para acondicionar el terreno que ocupará la planta sobre una superficie de 74.600 metros cuadrados. Será necesario un movimiento de 1,8 millones de metros cúbicos de tierras, que se destinarán a rellenos en el Puerto.

A estos 16 meses se añadirán otros dos años para la construcción de la planta, que tendrá una capacidad de almacenamiento de 208.795 metros cúbicos de productos petrolíferos, repartidos entre gasolinas, gasóleos y jet para aviación. La planta de Muskiz tiene ahora una capacidad de 362.000 metros cúbicos y la otra instalación en Euskadi, en Santurtzi, alcanza los 130.000 metros cúbicos. El menor almacenamiento en la futura instalación se explica por la proximidad de la refinería de Petronor.

La nueva planta en el puerto requiere una inversión de 53,2 millones de euros -"el doble de lo habitual" debido al gran movimiento de tierras-, a lo que se añaden otros 7 millones destinados a paliar la paulatina supresión de tanques en Muskiz.

Los responsables de CLH aseguraron ayer que este presupuesto aumentará con el coste de la demolición de los tanques actuales y la regeneración ambiental del área de Muskiz. La intención de la compañía es iniciar los trabajos de restauración -el ministerio exigió que restituyese la zona a su estado original de hace 34 años, cuando eran marismas de gran valor ambiental- en 2004, después de que el próximo año se hayan demolido cuatro tanques más en Muskiz. "Primero hay que hacer una caracterización del terreno para ver cómo está el suelo y si es necesaria la regeneración. Con ocho tanques demolidos tenemos una superficie suficiente para hacer ese trabajo", señaló el director de Operaciones de CLH José María Santos. La compañía palía la pérdida de capacidad de almacenamiento con una estación de bombeo construida en Petronor y el aumento de capacidad de la planta de CLH en Miranda de Ebro.

La demora en los plazos para regenerar Muskiz -el plan del Ministerio de Medio Ambiente establecía la demolición total para octubre del pasado año y culminar la la regeneración vegetal en marzo de 2004- ha llevado el tema a los tribunales, ya que el Gobierno central quiere ejecutar el aval de 4,5 millones de euros que tuvo que depositar CLH en 1997 para seguir funcionando en Muskiz.