El Pentágono convoca a miles de reservistas para una ofensiva contra Irak

El Pentágono tiene previsto convocar a miles de reservistas en los próximos días ante una posible ofensiva contra Irak, según informó ayer The New York Times, que cita como fuente a funcionarios militares que no identifica. Por lo menos 10.000 reservistas serán activados, principalmente para desempeñar funciones de policía militar, y se unirán a los 50.755 movilizados desde el 11 de septiembre.

Esta información se produce en un día en el que el presidente iraquí, Sadam Husein, se mostró conciliador con la ONU y pidió a los iraquíes "paciencia" ante el trabajo de los inspectores de desarme de Naciones Unidas, que calificó de "oportunidad" para demostrar su buena fe. El discurso de Sadam contrasta claramente con las declaraciones del miércoles de altos funcionarios iraquíes que acusaron a los inspectores de ser agentes de Israel y de la CIA.

En su primer discurso público desde la llegada de los inspectores de armas a Irak, Sadam subrayó que lo "fundamental" es "despejar las dudas" en torno a la posibilidad de que su país tenga armas de destrucción masiva". "Hermanos, camaradas y, a través de vosotros, el gran pueblo de Irak, vuestra paciencia es bella pero vuestra cólera y vuestra revuelta serán igualmente grandes cuando la situación lo exija", agregó en un discurso con motivo del Aid el Fitr, la fiesta que marca el final del Ramadán.

El portavoz de la Casa Blanca, Ari Fleischer, afirmó ayer en respuesta al líder iraquí que Washington tenía "razones muy sólidas" para pensar que Bagdad dispone de este tipo de armas. El propio presidente George W. Bush aseguró más tarde que Sadam debía desarmarse y dijo que los expertos de la ONU no estaban en Irak "para jugar al escondite". Según The New York Times, la amplitud y el calendario de las movilizaciones dependerán de la respuesta iraquí frente a la labor de los inspectores.