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Interior levanta la alerta por el temporal después de otra jornada de fuertes lluvias

Los bomberos tuvieron que rescatar a dos conductores atrapados por las aguas

Interior levantó ayer la alerta por el temporal después de cuatro días consecutivos de intensas lluvias en Euskadi. Ayer volvieron a registrarse cortes de carreteras, los principales en la A-8 en Bilbao y en las carreteras de Hernani a San Sebastián y a Goizueta, así como en un tramo de la Pamplona-Francia. Los bomberos tuvieron que rescatar a dos conductores en Guipuzcoa y Navarra y ocho familias fueron desalojadas de sus pisos en Bilbao.

Interior considera que el temporal ya va a ir a menos, aunque las lluvias continuarán hoy, si bien con menor intensidad. El servicio SOS Deiak advierte, sin embargo, de un descenso de las temperaturas, por lo que la cota de nieve bajará hasta los 700 metros de altitud.

En Guipúzcoa, las intensas precipitaciones causaron desbordamientos en la cuenca del río Urumea en Hernani y en las zonas bajas de la regata Jaizubia y la bahía Txingudi en Irún, los dos puntos más conflictivos de la red hidrográfica provincial. Según el Departamento de Obras Hidráulicas de la Diputación, los ocho embalses guipuzcoanos están por encima del 70% de su capacidad y en algún caso se han visto obligados a abrir sus aliviaderos al superar su capacidad máxima. En Hernani y Astigarraga se han recogido 125 litros de agua en las últimas 24 horas.

En este punto, el Urumea sobrepasó su cauce y anegó la carretera entre Hernani y San Sebastián y la que une aquel municipio con Goizueta. Ambas vías fueron cortadas al tráfico e incluso fue necesaria la intervención de los bomberos para rescatar a un camionero que quedó bloqueado con su vehículo en el tramo entre Hernani y Astigarraga. La carretera de la costa, otro de los puntos negros de la red viaria guipuzcoana, registró caídas de tierra y piedras sobre la calzada entre Zarautz y Getaria, lo que obligó a cerrar uno de los carriles.

Nuevos cortes en la A-8

En Vizcaya, los problemas se repitieron en la A-8. Un desprendimiento de tierras a la entrada de Bilbao -en el puente de Miraflores- obligó a cortar un carril en dirección a San Sebastián. La interrupción del tráfico se inició a las seis de la mañana, fue restablecido a mediodía y volvió a cortarse después para terminar de limpiar la calzada. Por tercer día consecutivo, la principal vía de acceso a Bilbao sufrió muy importantes retenciones de tráfico, debido también a dos accidentes leves que complicaron la circulación. Las balsas de agua obligaron además al cierre momentáneo de la carretera en Erandio, informa Alberto Uriona.

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En el barrio bilbaíno de Rekalde-Betolaza, ocho familias fueron desalojadas por la tarde de sus domicilios tras aparecer una importante grieta en un muro de contención colindante que amenazaba con derrumbarse.

En cuanto a los ríos, no hubo ningún desbordamiento, según Interior, puesto que las precipitaciones disminuyeron respecto a la víspera. En el pantano de Ordunte se recogieron 17,1 litros por metro cuadrado y 13,3 litros en Bilbao.

Las lluvias originaron escasos problemas en Álava, aunque el Zadorra se desbordó a su paso por el municipio burgalés de La Puebla de Arganzón, por lo que tuvo que cortarse el tráfico en la carretera que une el Condado de Treviño con Pobes. Los embalses del Zadorra llegaron ayer al 77% de su límite, un 19% más que hace una semana.

En Navarra, los bomberos realizaron 23 intervenciones, incluido el rescate de un conductor que quedó atrapado en su vehículo por el agua en uno de los accesos a Pamplona. Un tramo de la carretera Pamplona-Francia fue cortado a causa de un desprendimiento.

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