Solidaridad con Paco Casero
La semana pasada el Ayuntamiento de Nerva, gobernado por el socialista (es un decir) José Villalba, ordenó la demolición parcial de la casa de Paco Casero, presidente del Comité de Agricultura Ecológica de Andalucía y miembro de Ecologistas en Acción.
Paco ha realizado una reforma de una antigua casa; nada de nueva construcción, nada de especulación, nada de complejos urbanísticos en suelo no urbanizable. Una mera reforma ejemplar de una casa de pueblo. En el Ayuntamiento le aseguraron que podía comenzar las obras mientras se tramitaba la licencia, al igual que se hacía en otros casos en este pueblo. Paco pecó de ingenuo y, al acabar la reforma, el alcalde inició el expediente para proceder a su derribo.
Villalba es un auténtico canalla que ha fomentado la mayor confrontación ciudadana vivida en este pueblo onubense por su intransigente apoyo al vertedero de residuos tóxicos. No le ha perdonado a Casero su apoyo a la Plataforma Antivertedero. La venganza es la única arma de los miserables que carecen de argumentos y de la más mínima ética política.
En una Andalucía arrasada por la especulación urbanística, donde la indisciplina urbanística está a la orden del día y la corrupción anida en múltiples ayuntamientos, es incomprensible que se haya actuado de esta forma con una persona honesta que ha dado lo mejor de su vida en defensa de Andalucía.
Este "celo" del PSOE en aplicar la disciplina urbanística en Nerva contrasta con su actuación en otros ayuntamientos. Esa misma semana los ayuntamientos socialistas de la comarca gaditana de La Janda realizaban plenos para solicitar que no se cumpla la sentencia del TSJA que ordena la demolición de Montenmedio, complejo urbanístico ilegal que incluye casa-palacio, hotel, campo de golf, picadero... en suelo forestal no urbanizable especialmente protegido.
El alcalde socialista de Ojén ha sido condenado a dos años de cárcel por dar licencias de obras en zona de protección forestal. La ejecutiva provincial del PSOE de Málaga lo ha apoyado sin reservas. La Junta de Andalucía no ha derribado ni una sola de las cientos de edificaciones ilegales construidas en esta última década en Marbella. Sólo Ecologistas en Acción tiene interpuesta más de 130 denuncias por delitos contra la ordenación del territorio contra el gobierno del GIL.
El alcalde socialista de Nerva ha aplicado la doctrina Sharon, demoler las casas de sus adversarios. Los dirigentes del PSOE -muchos de los cuales nos han mostrado en privado su rechazo a esta actuación vengativa de Villalba- callan en público.
Ecologistas en Acción toma nota de esta agresión sin precedentes contra uno de nuestros más queridos compañeros.-
