Los efectos del desastre durarán cuatro años, según los expertos

La marea negra provocada por el Prestige alterará el ecosistema de los 200 kilómetros de costa que por ahora ha afectado el vertido. Según Victoriano Urigorri, director de la Estación de Biología Marina de A Graña (A Coruña), todos los organismos que toque el combustible derramado morirán. "Como el fuel flota, afectará principalmente a los seres vivos que nadan en la superficie, pero sobre todo a los de la costa; desde las aves marinas que inevitablemente se mancharán y lo tragarán, hasta otros organismos más pequeños que forman parte de la cadena alimentaria del ecosistema, como gusanos, esponjas, gorgones, caracolas, estrellas de mar, erizos, algas..."

La asociación ecologista WWF/Adena observó ayer más de 250 aves de 18 especies diferentes pringadas de combustible, entre las que destacan diferentes especies de gaviotas, cormoranes, alcatraces y alcas. Los efectos del desastre durarán al menos cuatro años. "Es como si en un bosque arrasamos con todo y lo dejamos crecer de forma natural. Al principio saldrán algunas matas, después algunos arbustos... Así hasta que vuelvan a crecer los árboles", explica el biólogo. "Hasta que la costa no quede completamente limpia, todas esas especies no se podrán recuperar".

Para el biólogo, remolcar el petrolero hasta alta mar sólo ha servido para que la mancha de combustible se haga cada vez más grande. "Todo ese fuel, que afecta a una superficie cada vez mayor, llegará a la costa, porque en esta época del año los vientos vienen del noroeste", afirma.

Por eso Urigorri habría preferido hundir el Prestige o meterlo en una ría para que afectara a una superficie de costa menor. "Hubiera sido mejor, pero claro, a ver quién toma una decisión como esa".