El ex responsable de Olé declara que lo vendió por orden del Gobierno catalán

El ex director de la Fundació Catalana per a la Recerca (FCR) Josep Antoni Plana Castellví declaró ayer ante el juez que en 1996 se desprendió del buscador de Internet Olé por orden del Gobierno de Convergència i Unió (CiU), según fuentes judiciales. El buscador fue comprado por Pep Vallès, uno de los trabajadores de la entidad, por 1.202 euros y éste lo revendió tres años después por 18 millones de euros.

Plana Castellví compareció ayer en calidad de testigo en el Juzgado número 8 de Barcelona, que instruye el caso Olé. El ex director de la FCR, un puesto equiparable al de un alto cargo, declaró que Macià Álavedra, en aquella época consejero de Economía y presidente de la fundación, le pidió que se desprendiera del buscador como consecuencia de la polémica parlamentaria suscitada por la promoción con dinero público de un producto exclusivamente en castellano.

El ex director de la fundación vendió el buscador a Pep Vallès, uno de los trabajadores de la entidad, por 1.202 euros y éste lo revendió tres años después a Telefónica por 18 millones de euros, una operación que dio origen a Terra. El acuerdo reportó, además, a los propietarios de Olé derechos sobre acciones del portal, cuyo valor actual se aproxima a los 20 millones de euros.

La venta inicial, no obstante no consta en ninguna acta oficial de la FCR, una entidad que en la década de 1990 se financiaba mayoritariamente con fondos públicos y de cuyo patronato formaban parte cuatro consejeros del Gobierno catalán. Por esta razón el fiscal ha reclamado la imputación de Plana Castellví por supuesta apropiación indebida al no contar la venta con el preceptivo permiso del patronato.

Plana Castellví insistió ayer ante el juez en que el patronato no sólo fue informado de la operación, sino que vendió el buscador siguiendo instrucciones de su entonces presidente, Macià Alavedra. El ex director de la FCR explicó que informó de la operación en una reunión del patronato, pero que estas explicaciones no llegaron a constar en acta porque el orden del día no incluía ningún debate sobre Olé, según fuentes judiciales. Las mismas fuentes añaden que Plana Castellví justificó esta ausencia porque en aquel momento -antes del boom de Internet- Olé era un asunto menor, a pesar de que su lanzamiento fue anunciado por la revista oficial de la entidad.

El Gobierno catalán ha admitido varias veces el 'error' que cometió al desprenderse de Olé, y Xavier Trias, consejero de la Presidencia en 1996, anunció en el Parlament que el buscador se había privatizado. Un destacado miembro del Ejecutivo catalán de aquella época explicó a este diario que el Gobierno dio instrucciones genéricas a Plana Castellví para que se desprendiera del buscador con objeto de evitar la erosión política, aunque sin especificar cómo hacerlo. Éste optó por vender el producto a un trabajador de la entidad por sólo 1.202 euros sin que la operación conste en contrato oficial alguno ni tampoco en actas de la fundación.

El juez investiga también el presunto delito fiscal en la millonaria venta de Olé a Telefónica en 1999 a través de empresas en el extranjero participadas, entre otros, por el ex consejero de Telefónica Martín Velasco.