Los inspectores de la Junta creen que la póliza de Castillejo va contra la ley
Economía dirá ahora si el seguro del presidente de Cajasur es ilegal
Los inspectores de la Junta de Andalucía que están auditando Cajasur consideran que la póliza de 2,9 millones de euros suscrita por la entidad a favor de su presidente, el sacerdote Miguel Castillejo, puede 'contravenir' la Ley de Cajas andaluza. En concreto, citan el artículo 50.2, que prohíbe que los presidentes ejecutivos puedan percibir una 'indemnización' cuando abandonen el cargo.
Éste es el paso previo para que la Consejería de Economía se pronuncie sobre la legalidad o ilegalidad de la póliza de Castillejo. Este seguró permitirá cobrar al presidente de Cajasur una renta vitalicia cuando abandone la entidad cordobesa equivalente al salario que en ese momento cobre el director general más 3.005 euros (en total, unos 213.000 euros en 2001). Además, la mitad de esta renta será heredada por sus cuatro hermanas sucesivamente y de mayor a menor hasta que fallezca la última.
Economía pidió la semana pasada a los inspectores una 'valoración' sobre la póliza que le entregaron ayer. En opinión de los inspectores, la clave reside en que el seguro de vida, modalidad de rentas, 'establece la condición de que, para el cobro de la renta, el presidente deberá haber cesado a iniciativa propia o de la entidad en el cargo de presidente ejecutivo de la entidad'. En definitiva, entienden que se trata de una indemnización, expresamente prohibida en la Ley de Cajas autonómica.
Cajasur tiene en su poder dos informes jurídicos (del ex ministro Manuel Clavero Arévalo y del bufete de Garrigues) que justifican la percepción de esta renta. En los informes se defiende que no es una 'indemnización', sino un complemento de pensión.
La póliza garantiza a Castillejo que siga cobrando su retribución actual (213.000 euros) cuando deje la caja. Además, de esa salario anual, que se le reconoció en 1985, el presidente de Cajasur dobla sus ingresos a través de incentivos y dietas, aunque en una entrevista a este periódico en 1996 dijo que su trabajo era 'gratuito'.
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