_
_
_
_
_
Columna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las columnas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

Jiménez Villarejo, en el foco

Ayer, el Telediario de la primera cadena de TVE dio cuenta, pasadas las tres de la tarde, del nuevo Estatuto del Ministerio Fiscal aprobado por el Consejo de Ministros. En la pantalla apareció el ministro de Justicia, José María Michavila. Según explicó, los mandatos de cinco años establecidos ahora para todos los fiscales jefes son coherentes con el plazo -inexistente- del fiscal general del Estado.

En la escena siguiente, la cámara enfocaba el plano de una reunión de la Junta de Fiscales de Sala. Mientras el foco se aproximaba a Jesús Cardenal, de golpe se posó a su izquierda. El fiscal jefe de la Fiscalía Anticorrupción, Carlos Jiménez Villarejo, estaba por tomar asiento. Y en ese preciso instante, la voz en off dijo : 'Carlos Jiménez Villarejo lleva más de cinco años'.

La crónica no citó a ningún otro fiscal jefe. ¿Los había? Claro. Juan José Martínez Zato, fiscal jefe de la inspección en la Fiscalía General del Estado lleva diez años; Mariano Fernández Bermejo es fiscal de Madrid desde 1992 y José María Mena dura ya 6 años y medio en Cataluña. Todos, pues, están en la misma situación que su colega de la Fiscalía Anticorrupción.

El que avisa no es traidor, claro. Jiménez Villarejo criticó abiertamente, en el congreso de la Unión Progresista de Fiscales, el proyecto aprobado por el Gobierno y afirmaciones como las que ayer repitió el ministro Michavila sobre la existencia de una presunta limitación del mandato del fiscal general del Estado. Jiménez Villerejo volvió sobre el tema el pasado 28 de octubre en una conferencia en la Universidad de Santiago. El PP, sostiene, está haciendo un abuso de la limitación de mandatos por razones políticas; esto es, para separar a los fiscales jefes insumisos.

La Fiscalía Anticorrupción está en la cuerda floja. El pasado 15 de mayo, a iniciativa de Jiménez Villarejo, Cardenal propuso a Michavila el nombramiento de Salvador Viada para cubrir la vacante de teniente fiscal, el número dos de la Fiscalía Anticorrupción. Todavía espera respuesta.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_