Críticas al Gobierno por su escasa presencia en un congreso de inmigración

El tercer congreso nacional sobre Inmigración que se celebra desde hoy hasta el día 9 en Granada contará con una escasa participación del Gobierno estatal, que sólo aporta 9.600 euros de los 72.000 que este encuentro tiene de presupuesto. Además de la limitada cuantía económica con la que contribuye, la Administración central tiene una presencia casi testimonial en el foro, pues de los 264 ponentes y comunicantes que participan sólo tres de ellos provienen de algún órgano controlado por el Ejecutivo.

En contraposición con la postura que el Gobierno mantiene respecto a este encuentro, y a pesar de su carácter nacional, la Junta de Andalucía ha aportado el 65% de los recursos económicos necesarios y sus máximos representantes, como el presidente, Manuel Chaves, estarán presentes en los días de celebración.

El director del Laboratorio de Estudios Interculturales de la Universidad de Granada y organizador del evento, Francisco Javier García Castaño, destacó ayer la ausencia de la Delegación del Gobierno para Extranjería, que, a su juicio, es el órgano idóneo para intervenir en el congreso. La escasa aportación económica proviene del Instituto de Migraciones y Servicios Sociales, dependiente del Ministerio de Trabajo.

Los dos primeros congresos nacionales sobre esta faceta social se celebraron en años anteriores en Madrid. Esta es la primera vez que el simposio tiene una sede diferente a la capital española, lo que significa 'un reconocimiento al profundo trabajo que la Universidad de Granada está realizando en relación a la inmigración', en opinión del rector de esta institución docente, David Aguilar.

Aunque la Universidad de Granada ejerce de anfitriona y principal organizadora, en el congreso participan 39 universidades de toda España, así como organizaciones no gubernamentales, sindicatos, administraciones autonómicas y locales y centros de investigación.

Políticas de inmigración

Aunque el foro tiene un carácter eminentemente científico, tanto el rector de la Universidad granadina como la delegada de Asuntos Sociales en Granada, María José Sánchez, explicaron que el objetivo último es que sirva de 'punto de inflexión para el análisis de las políticas sobre inmigración', tanto estatales como autonómicas.

'Es necesario investigar el fenómeno de la inmigración para saber cómo abordar las competencias que tiene el Gobierno andaluz en materias como Salud, Educación o Servicios Sociales, siempre en relación a la población inmigrante', expuso la representante del Ejecutivo autonómico. 'Nuestra aportación', continuó Sánchez, 'se debe a la pretensión de que el congreso ayude a planificar las políticas sobre inmigrantes'.

La preocupación de la Junta sobre este aspecto se fundamenta en el rápido aumento de la población inmigrante en Andalucía, que se ha triplicado en los últimos diez años. Si en 1991 había en esta Comunidad 48.000 inmigrantes, en 2001 esta cifra llegó a las 157.000 personas. Málaga y Almería son las provincias andaluzas que acogen a la mayor parte de esta población. En la primera, los inmigrantes proceden principalmente de Europa y en Almería predominan los latinoamericanos y magrebíes.

Las 179 ponencias y comunicaciones que se expondrán en Granada durante los próximos días tienen como autores a expertos en este ámbito de 42 provincias españolas. Sin embargo, el mayor número de participantes proviene de Cataluña y Andalucía, comunidades que aportan cada una alrededor de 80 participantes.

También está prevista la intervención de personas de otros países como Marruecos, Argelia, México o Estados Unidos. Pero ninguno de ellos lo hará en representación de las instituciones de su país, pues sólo se ha dado cabida a organizaciones de ámbito nacional.