El Gobierno rebaja a última hora su previsión de crecimiento este año al 1,8%

El Gobierno vasco corrigió ayer a la baja, a apenas dos meses de que concluya el año, sus previsiones de crecimiento económico para este ejercicio. Hasta ayer había mantenido que iba a rondar el 3%. Ahora, enmarcado en la aprobación de los presupuestos para 2003, proyecto de ley al que el Consejo de Gobierno dio ayer su visto bueno, deja el porcentaje en algo más de la mitad: un 1,8%.

El crecimiento económico de Euskadi este año se convirtió en objeto de polémica en el primer semestre por los datos que presentaba el Gobierno vasco, que defendió en diversas ocasiones colocarlo en un 3%, frente a la opinión de diversos especialistas, como el estudio del Consejo Superior de Cámaras de Comercio que lo situó en el 2,2%. Euskadi sigue así al final la tendencia de las economías de su entorno, todas las cuales han debido corregir sus previsiones a la baja.

El FMI coloca el crecimiento de Alemania en un 0,5% y el de Francia en un 1,2%, por ejemplo. Euskadi crecerá por vez primera en los últimos años por debajo de la media del conjunto de España que, según la corrección a la baja del Gobierno central quedará en un 2,2%. La economía vasca creció en 2001 un 3,1%.

Pese a la rebaja, el Gobierno aspira a que la tasa de paro se sitúe al final de este ejercicio en un 7%. El Ejecutivo vasco se ha mostrado algo más optimista al analizar la coyuntura del año próximo, para el que hace una previsión de crecimiento del 2,2%, lo que, a su entender, permitirá dejar la tasa de paro en el 6,7% de la población activa.

El proyecto de ley presupuestario prevé una cifra global de ingresos y gastos de 6.185 millones de euros, un 4,6% más que el presentado el año pasado. La vicelehendakari, Idoia Zenarruzabeitia, aseguró tras la reunión del Consejo de Gobierno que las cuentas entrarán en el Parlamento de Vitoria antes del próximo viernes.

La principal pregunta sobre el proyecto es cómo negociará su aprobación el Gobierno. La vicelehendakari, Idoia Zenarruzabeitia, no quiso ayer adelantar estrategias. Ante la insistencia de los periodistas, dejó claro que el Ejecutivo se muestra dispuesto a hablar con todas las fuerzas políticas, pero rechazó que pueda llegar a un pacto con Batasuna si mantiene sus actuales posiciones, ya que se necesita respetar 'unos mínimos' respecto a la violencia de ETA.

La vicelehendakari deseó que el debate presupuestario discurra por cauces distintos a los del pasado año y que no se vuelva a producir un bloqueo. El debate del ejercicio pasado en el Parlamento estuvo marcado por el cambio de interpretación del presidente de la Cámara, Juan María Atutxa, sobre el Reglamento para tramitar las enmiendas a la totalidad, evitando de esa forma que la oposición devolviese el proyecto al Ejecutivo. A ello siguió el bloqueo del debate en pleno por la oposición y la aprobación finalmente de casi un 70% de las partidas gracias a la abstención de Batasuna. Así, se logró una suerte de norma mezcla del presupuesto del año 2001 prorrogado y de las modificaciones aprobadas por la Cámara.

Esta norma se encuentra recurrida por el Gobierno central ante el Tribunal Constitucional. La composición del Parlamento sigue evidentemente siendo la misma y existe el riesgo de que la fractura entre el tripartito y la oposición, acrecentada tras la presentación de la propuesta soberanista del lehendakari deje otra vez el futuro de las cuentas en manos de Batasuna.

'El abrazo'

Para Zenarruzabeitia la inmensa mayoría de los ciudadanos comparten su política presupuestaria, que tiene como objetivos el crecimiento económico y sostenible, el incremento del gasto social, la atención a los más necesitados, la redistribución de la riqueza, el equilibrio territorial y la consolidación de una enseñanza y un sistema sanitario de calidad. Así, se preguntó que razones tienen populares, socialistas e independentistas para rechazarlos.

El Gobierno cuenta con el respaldo de 36 de los 75 escaños del Parlamento y necesita al menos 38 para la aprobación de las cuentas. Zenarruzabeitia mantuvo que el proyecto actual debe poder pasar en la Cámara ya que el Gobierno tripartito tiene mayoría. Aseguró que de no aprobarse el proyecto sería sólo porque se produciría un 'abrazo, un acuerdo, entre los que ilegalizan [a Batasuna, en referencia al PP y el PSOE] y los que van a ser ilegalizados porque los primeros dicen que son lo mismo que ETA'.

La vicelehendakari arguyó que 'no hay alternativa a estos magníficos presupuestos'. Así, no quiso especular sobre una posible prórroga y exigió a la oposición respeto para la Cámara.

Respecto al dinero que el Ejecutivo autónomo gastará en materias aún no transferidas, Zenarruzabeitia confirmó que el dato ha sido cuantificado en el documento presupuestario, como anunció el lehendakari en el debate de política general del 27 de septiembre, pero eludió hablar dar precisiones este asunto, hasta que las cuentas no sean presentadas en la Cámara, aduciendo la necesidad de respetar a las instituciones.

Los presupuestos que aprobó ayer el Gobierno buscan, según Zenarruzabeitia, la convergencia tecnológica con Europa y el mantenimiento de la inversión pública. Con estas pautas no renuncian al equilibrio y presentan un déficit casi anecdótico de 270.040 euros, apenas un 0,004% del total del gasto. En todo caso, rompen con la tendencia a presentar superávits.

El 72,52% del gasto total (4.485 millones de euros) se destinará a materias de carácter social, un 7,3% más que en el proyecto presentado hace un año. En todo caso, en este apartado se incluyen los dos principales departamentos gubernamentales en cuanto al gasto, Educación y Sanidad (ver gráfico).

Algunas de las iniciativas sociales del proyecto que ayer quiso destacar la vicelehendakari son las siguientes:

- Renta Básica. El salario social aumenta y quedará establecido en el 81% del Salario Mínimo Interprofesional. El objetivo es llegar al 86% en 2006.

- Apoyo a familias. El plan interinstitucional de apoyo a las familias con hijos se lleva 32,2 millones de euros.

- Sanidad y Educación. Los presupuestos de estos departamentos crecen un 6,2% en conjunto.

- Vivienda. El Ejecutivo añadirá al segundo Plan Director de Vivienda Etxebide 2002-2005 una oferta específica de pisos en alquiler para las rentas más bajas. El proyecto destina 131,9 millones de euros para la ejecución de dicho plan en 2003.

- Planes interinstitucionales. Más allá del gasto social, el Gobierno quiso incidir en la importancia de este tipo de planes y señaló que su objetivo es alcanzar el 1,85% del PIB en el gasto dedicado a investigación científica, técnica y aplicada para el año 2005.

Zenarruzabeitia destacó también como una de las características del proyecto el impulso de la inversión pública. Las inversiones reales y transferencias de capital sumarán 754,6 millones de euros, cifra que se eleva hasta 1.014,4 millones si se incluyen las partidas dedicadas a financiar las inversiones propias de las sociedades y entes públicos (48,4 millones más que el proyecto para 2002).