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El Bellas Artes de Vitoria muestra la obra adquirida después del Artium

El museo inaugura una colección de artistas vascofranceses

El Museo de Bellas Artes de Vitoria exhibe hasta el 12 de enero de 2003 las más de cien obras que ha adquirido entre abril de 2001 y agosto de 2002. Es decir, el periodo en el que se ha orientado a la recuperación del arte español del XIX, y el vasco entre 1850 y 1950, después de la cesión al Artium de sus importantes fondos de arte contemporáneo español. Como novedad, el museo se abre a los creadores vascofranceses.

La muestra recoge obras de imprescindibles como Ignacio Díaz Olano, los hermanos Arrue o José María Ucelay, pero también abre nuevos apartados en esta colección, como la posibilidad de ingresar obras mediante dación (pagos de impuestos en obras de arte). Y, lo más interesante, el museo amplia su dilatada nómina con 30 nuevas incorporaciones. Destaca Eduardo Zamacois, la primera referencia española importante en el pequeño cuadro de género, con escenas costumbristas. Así es Nonchalance, la pieza adquirida, donde se representa a una mujer desnuda en actitud indolente sobre un fondo en ocres, perlas y rojos luminosos.

Otros de los que han pasado a formar parte de esta colección son Adolfo Guiard, el primer artista vasco que emplearía un lenguaje plenamente moderno; José Salís, especializado en las marinas; o los paisajistas Enrique Mugica, Domingo Apellaniz o Ángel Olarte. Mención aparte merecen las aportaciones postcubistas de Santiago de Uranga o el carácter polifacético de Antonio de Guezala, de quien se incluyen entre las novedades 12 curiosos ex libris.

El mayor número de las obras incorporadas ha sido adquirido mediante compra a anticuarios o en subastas de arte. En total, el Museo de Bellas Artes de Álava ha invertido algo más de 360.600 euros en la compra de unas cien piezas. Pero, por primera vez en su historia, la pinacoteca ha ingresado piezas de calidad excepcional a través de daciones.

Por este sistema se han incorporado a sus colecciones tres pinturas: La pacificación de los bandos oñacino y gamboíno por el corregidor Gonzalo Moro en 1394, de José de Echenagusía; Familia de pescadores, de Ramón de Zubiaurre, por parte de la Caja Vital; y Caballos, de José Iturrino, aportado por El Corte Inglés. Estas tres obras están valoradas en unos 240.400 euros.

Entre las adquisiciones de pintores ya presentes, se puede destacar la inclusión de uno más a la galería de autorretratos: Cabanas Oteiza. También se exhiben retratos de pintores como el que realizó Pablo de Uranga a Darío de Regoyos tocando la guitarra.

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Y no hay que olvidar las nuevas compras de los miembros de El Coitao, revista crítica fundada en Bilbao en 1808, embrión de la Asociación de Artistas Vascos. Entre ellos se encuentra los hermanos Arrúe, Gustavo de Maeztu o el navarro Jesús Basiano.

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