La UE presiona a España para lograr un acuerdo con Eslovaquia sobre Seat

España se ha quedado sola contra Eslovaquia por culpa del caso Seat y la presidencia de turno danesa va a ejercer hoy su presión sobre este asunto al introducirlo en la agenda de los ministros de Exteriores de la UE, reunidos en Luxemburgo. La Comisión Europea y todos los países miembros, excepto España, aceptaron la semana pasada que Seat disponga de una exención fiscal de hasta el 30% de su inversión inicial en Eslovaquia. La ministra Ana Palacio se declaró dispuesta a negociar, mientras Eslovaquia espera un acuerdo que desbloquee las negociaciones de adhesión a la UE.

La Comisión Europea y algunos socios de la UE le están pidiendo a España cierta generosidad en este asunto. En el Ejecutivo europeo explican que permitir a Eslovaquia aplicar una exención del 30% a la empresa alemana Volkswagen, propietaria de Seat, es algo a lo que tiene derecho, ya que ese país es Objetivo A (renta per cápita menor del 75% de la media europea). Y añade: 'En España muchas empresas se han beneficiado de esta norma que rige en la UE'.

Pero lo cierto es que el anuncio hecho el pasado 26 de septiembre por Seat de trasladar el 10% de la producción del modelo Ibiza de Martorell a Eslovaquia ha emponzoñado la negociación, cuando la UE intenta cerrar capítulos de la ampliación tan importantes como el de la competencia, que contempla, entre otras, las ayudas de Estado.

Eslovaquia ha cambiado en el último año su legislación para alinearse a las normas comunitarias y ha llegado a un nuevo acuerdo con Volkswagen, que se acogió en 1998 a las vacaciones fiscales que durante 10 años le aseguraba la normativa entonces vigente. Pero, como explica una fuente diplomática española, 'este tema es muy sensible ahora en España y hay que tratarlo a nivel político'.

Talante negociador

La ministra Ana Palacio lo tratará hoy en el seno del Consejo de Asuntos Generales, que tiene lugar en Luxemburgo. 'Vengo con talante negociador y quiero pulsar el termómetro político de mis colegas', dijo Palacio. 'Hay que defender el acervo europeo y también quizá admitir excepciones, pero éstas deben resolverse en el menor plazo de tiempo posible'. Hasta este año, Volkswagen dsifrutaba de una exención fical del 100% en su inversión eslovaca. En las negociación de adhesión la Comisiónpropuso limitar las exenciones al 30% de la inversión inicial, propuesta que todos los países aceptaron... con excepción de España. El mecanismo es que la empresa disfrutará de la exención legal hasta el momento en que alcance el 30% de la inversión inicial. Las deducucciones por este concepto se consideran ayudas de Estado. 'Es una excepción contemplada para las empresas ya establecidas. Las nuevas inversiones no tendrán tal beneficio', explica la Comisión Europea.

'Nuestra situación es jurídicamente muy complicada', explicaba ayer a este periódico el embajador adjunto eslovaco ante la UE, Peter Yavorcik. 'Estamos a dos bandas: con la Comisión por un lado y con la industria por otro, a la que necesitábamos atraer y para la que concebimos un régimen de vacaciones fiscales que dieron resultado. Hemos intentado resolver todas las pegas y hemos conseguido el acuerdo de todos, menos de España', concluye.

La Comisión Europea considera que la negociación sobre este capítulo, vital para avanzar en la adhesión de los nuevos países candidatos a entrar en la UE, no tiene nada que ver con el caso Seat. 'En realidad es un asunto particular que España debe tratar con Volkswagen', dice una de las fuentes que interviene en la negociación. Lo cierto es que, mientras tanto, el traslado de una parte de la producción del Ibiza a Bratislava, la capital eslovaca, puede suponer, según los sindicatos, la pérdida de 500 empleos en España de 500 empleos directos y 4.500 indirectos.

El Ministerio de Ciencia y Tecnología anunció la pasada semana que su titular, Josep Piqué, se reunirá el 12 de noviembre en Alemania con el presidente del consorcio automovilístico, Bernd Piechstrieder. En Bruselas, los negociadores españoles insisten: 'No hemos bloqueado nada. Sólo nos hemos dado un plazo para estudiar este asunto'.