_
_
_
_

Italia acude hoy a la huelga general

La CGIL, la confederación sindical más importante de Italia, con 5,4 millones de afiliados, lanza hoy un nuevo desafío al Gobierno de Silvio Berlusconi, convocando en solitario una huelga general que aspira a paralizar el país, y a forzar un paso atrás en la reforma del mercado de trabajo. Pero, a diferencia de lo ocurrido el 16 de abril, el paro nacional no tiene el respaldo de los otros dos grandes sindicatos, CISL y UIL. Para el Gobierno de centro-derecha, se trata de una 'huelga política', pero no todos los integrantes de la coalición de centro-izquierda la apoyan. Mientras los Demócratas de Izquierda (DS) estarán en la calle, La Margarita (grupo de cuatro partidos moderados) se ha distanciado.

El éxito de la huelga es incierto, aunque la fuerza de la CGIL es enorme y la iniciativa se 'beneficia' del clima de incertidumbre que se ha creado en Italia a raíz de la crisis de Fiat. No es casual que el líder del sindicato, Guglielmo Epifani, haya escogido Turín para desfilar en una manifestación en la que estará arropado por el líder de los DS, Piero Fassino y por el secretario general del Partido de Refundación Comunista, Fausto Bertinotti. La Confederación aspira a paralizar los transportes, las fábricas, los museos, bancos y oficinas postales, las escuelas, y los comercios. De momento, Trenitalia, el ente que gestiona los ferrocarriles, ha anunciado que circulará el 60% de los trenes, mientras la compañía aérea de bandera, Alitalia, cancelará 275 vuelos, dejando en tierra a 35.000 pasajeros. Más desigual se espera el seguimiento en la escuela. Programada hace meses por el entonces secretario general de la CGIL, Sergio Cofferati (que desfilará en Milán, junto a los empleados de la Pirelli, donde trabaja), la huelga tenía como objetivo impedir la aplicación del Pacto para Italia, firmado por el Gobierno con los otros dos sindicatos. Dicho acuerdo aceptaba una tímida modificación del artículo 18 del Estatuto de los Trabajadores, que obliga a un empresario a reincorporar a un empleado injustamente despedido.

Trabajadores de una planta de Fiat situada en Sicilia se manifiestan en Roma contra el anunciado recorte de empleos.
Trabajadores de una planta de Fiat situada en Sicilia se manifiestan en Roma contra el anunciado recorte de empleos.AP

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_