Prodi califica de "estúpido, rígido e imperfecto" el Pacto de Estabilidad

El presidente de la Comisión Europea, Romano Prodi, calificó ayer el Pacto de Estabilidad de instrumento 'estúpido' por su exceso de 'rigidez' e 'imperfecciones', y defendió la necesidad de que se cree un gobierno económico 'con autoridad' para adoptar decisiones que se ajusten a la situación real de los países de la zona euro y de la Unión Europea. Las declaraciones de Prodi crearon un importante revuelo ayer en Bruselas, ya que ponen en evidencia el trabajo del comisario de Asuntos Económicos y Financieros, Pedro Solbes. Éste no quiso entrar en polémica con Prodi.

Romano Prodi declara, negro sobre blanco, en una entrevista con el vespertino francés Le Monde, que sabe 'muy bien que el Pacto de Estabilidad es estúpido, como todas las decisiones que son rígidas'. El calificativo fue precedido de otras valoraciones: 'Es imperfecto', razona Prodi, porque hace falta tener 'un instrumento más inteligente y más flexible'. Y 'si queremos flexibilidad e inteligencia, hace falta tener autoridad', concluye. Una autoridad que, en opinión de Prodi, 'nadie' tiene y que está más en los mercados, 'ése es el problema'.

El presidente de la Comisión Europea explica a Le Monde: 'No podremos tener una Europa floreciente, fuerte, en crecimiento, sin poder ajustar las decisiones según la situación'. A la vez, asegura que la Comisión Europea 'dispone de esa inteligencia' de la que carece el pacto para aplicarlo 'con flexibilidad'. 'Pero hay que tener también autoridad', reiteró Romano Prodi, que se encuentra, curiosamente, entre los firmantes del Pacto de Estabilidad en junio de 1997.

Polémica

Prodi estaba esperando desde hacía tiempo el momento oportuno para hacer esta afirmación polémica: es decir, que Alemania y Francia se pusieran de acuerdo para flexibilizar el instrumento que ha servido de base para hacer converger las economías europeas y recibir con éxito al euro. Pero hoy, esas dos potencias económicas, las más fuertes de Europa, atraviesan por serios problemas financieros, con un déficit que puede superar este año el límite del 3% del PIB fijado en el pacto.

El portavoz del Ejecutivo comunitario, Jonathan Faull, dedicó ayer más de media hora a interpretar públicamente y minimizar las palabras de Romano Prodi, después de haber repartido entre la prensa copias de la entrevista en Le Monde horas antes de ser publicada. 'Un instrumento que en su aplicación se bloquea por culpa de la rigidez y de dogmas es estúpido en sí mismo. Por eso hace falta flexibilidad y que ciertos instrumentos evolucionen para su aplicación', afirmó Faull.

'El pacto es un instrumento automático, sin inteligencia en sí mismo, por eso lo que hace falta es una autoridad económica que gestione la política económica y la adapte a la situación del momento', explicaron. Y es que Bruselas ha defendido hasta el pasado 23 de septiembre la aplicación 'a rajatabla' de los términos del pacto.

'Se ha seguido hasta ahora un pensamiento equivocado, porque lo que hace falta ahora es realizar una labor política y no de policía', explicaron las mismas fuentes. El pensamiento de Romano Prodi coincide más con la visión del comisario europeo de Comercio, el francés Pascal Lamy, que con la del comisario Pedro Solbes. En una entrevista con el diario económico italiano Il Sole 24 Ore, Lamy calificó de 'medieval' el límite del 3% y dijo que esta regla había que cambiarla 'por una más inteligente'.

La situación más comprometida ahora es la de Pedro Solbes, el encargado de velar por la estricta aplicación del pacto y de proponer ante los ministros de Economía de la UE (Ecofin) las medidas correctoras necesarias para evitar deslices presupuestarios entre los Estados. Las declaraciones de Prodi se conocieron justo un día después de que Bruselas amenazara con actuar contra Berlín y París si superan este año el nivel del 3%.

Prodi, en declaraciones a la cadena SER, dijo que Solbes 'no sólo podrá continuar haciendo su trabajo, sino que estará aún más contento porque se le dará una capacidad de decisión mucho más fuerte y con menos límites'.

Solbes, informa Isabel C. Martínez, no quiso entrar en polémica con Prodi. Desde Vitoria, donde participó en unas jornadas, el comisario español aseguró que 'es difícil pensar que sus objetivos [del Pacto de Estabilidad] se alcancen en 2004. Pero sí tenemos la obligación de reducir los déficit estructurales' y ver 'cómo volvemos a la senda inicial', y cómo se avanza en coordinación. De otro modo, afirmó, 'la moneda única sufrirá'. 'Suceda lo que suceda, no podemos superar el 3% de déficit nominal', insistió.