Violencia e ignorancia

La Constitución española de 1978 reconoce y protege el derecho a expresar y difundir libremente pensamientos, ideas y opiniones. Por tanto, vestir una camiseta con algo escrito es, en principio, un derecho fundamental. Si, además, el mensaje de dicha camiseta no atenta contra la integridad física ni psíquica de ninguna persona, ese derecho de expresar y difundir libremente ideas queda doblemente justificado. Pero es que se recoge también el que ese derecho sea protegido, por eso no concibo que el llevar una camiseta que tenga escrito 'Euskal presoak, Euskal Herria' sea motivo para incitar y provocar una brutal paliza a un grupo de jóvenes. Los hechos, una noche de viernes pasada en la plaza sevillana de El Salvador. La justificación, no se me ocurre otra que la sinrazón de una violencia basada en la más atrevida de las ignorancias.

Para quien no lo sepa la frase en vasco significa 'Presos vascos, al País Vasco'. Ese es su significado, la interpretación depende de cada uno, aunque, por desgracia, parece que el pensamiento único se ha instaurado y no hay lugar para los matices.

Los jóvenes en cuestión intentaron marcharse sin comprender por qué los insultos calentaban a varias personas que minutos antes tomaban unas cervezas junto a ellos y que acabaron abalanzándoseles sin mediar palabra. Vergüenza es lo que califica el comportamiento de esas personas, así como del resto de los presentes y vecinos de la plaza. Vergüenza también ante la respuesta de la policía ('esa camiseta, en Sevilla, no'), teniendo en cuenta que su deber es el de proteger el derecho a la libre expresión. Debe ser que romper unas puertas en el Rectorado, por ejemplo, es mucho peor que dar una paliza hasta que la víctima tenga que ser atendida en el hospital.

No es lo mismo ser nacionalista vasco que ser terrorista, ni es lo mismo apoyar, llevando una camiseta, que los presos estén en el País Vasco que apoyar el terrorismo. Las cosas no son tan sencillas, para desgracia de aquellos que intentan que lo sean. Y si aún no estando de acuerdo con lo que dice una camiseta (aunque en realidad no se sepa lo que dice, pero como estaba en vasco, bueno no podía ser...), es mejor liarse a golpes en vez de preguntar y respetar por qué se lleva. Tengamos todos un día de furia y acabemos con todo lo que no nos gusta y nos lleva la contraria. Olvidemos todo y volvamos a las cavernas, al fin y al cabo, a algunos no les hace falta mucho.