Unicaja prevé un crecimiento del 2,7% para la economía andaluza en 2002

Aunque los indicadores de coyuntura conocidos no evidencian síntomas de despegue en la economía andaluza, ésta puede cerrar el año con un crecimiento en torno al 2,7%, medio punto menos que en 2001, según estima Analistas Económicos de Andalucía, consultora de Unicaja. La frenética actividad de la construcción es la principal causa de esta tendencia, mientras que la galopada de la inflación es el punto más débil de la economía regional.

El último informe de coyuntura de Analistas pone de manifiesto que en la primera mitad del año no se han observado claros signos de recuperación en la actividad económica en Andalucía, lo que ha tenido como consecuencia un incremento del 10% en el paro contabilizado en la Encuesta de Población Activa (EPA) durante el segundo trimestre del año. No obstante, la consultora matiza el resultado de esta evolución interanual del empleo con la consideración de las altas tasas de crecimiento que se registraron entre 2000 y 2001, y el fuerte aumento de la población activa (6,3%). En la segunda mitad del año el empleo podría crecer un 6%, proporción insuficiente para rebajar la tasa de paro.

Entre enero y junio, algunos indicadores mostraron incluso una ligera desaceleración en sus tasas de crecimiento respecto a meses anteriores, como el número de viajeros alojados en establecimientos hoteleros o la matriculación de vehículos.

La directora del área de coyuntura de Analistas, Felisa Becerrra, vaticinó ayer no obstante que en la segunda mitad del año la actividad económica 'retomará su senda creciente', aunque en ningún caso se alcanzarán las cuotas del año pasado. En la estimación de crecimiento del 2,7%, la consultora no ha considerado el sector agrario, debido a la falta de datos coyunturales sobre el mismo y la escasa fiabilidad de las estimaciones de producción.

El informe de Analistas refleja un mayor dinamismo en la economía andaluza que en la del conjunto del país, de forma que la previsión de crecimiento de actividad para todo el año es tres décimas superior a la que la misma consultora estima para España (2,4%). En el primer trimestre de 2002, la economía andaluza creció un 2,9%, dos décimas menos que en el mismo periodo de 2001, pero sensiblemente superior a la media nacional, que fue del 2,1%.

Una de las razones de esta diferencia es el comportamiento del sector industrial, que mientras que en Andalucía sigue mostrando una tendencia de crecimiento, a escala nacional se ha producido un descenso de la producción. No es que la actividad ofrezca muestras de gran fortaleza en la industria andaluza, pero sí buenas perspectivas y confianza. Así, uno de los datos que Analistas resalta es el índice de clima empresarial contenido en el barómetro del Instituto de Estadística de Andalucía, que ha pasado del -12,7% registrado en el primer semestre del año, al 12,5% para el segundo semestre.

Confianza

Este último dato convierte al sector industrial en el que mejor expectativas de evolución despierta, pese a que no ofrece una actividad tan intensa como la construcción o los servicios, cuyo futuro los empresarios parecen contemplar con muchas más cautelas.

El sector económico con mayor dinamismo en Andalucía es aún el de la construcción, aunque tampoco alcanzará los márgenes de crecimiento que tuvo en 2001 -todos los sectores económicos crecerán menos que el año pasado, según las estimaciones de Analistas-, e incluso el número de viviendas iniciadas puede ser de hasta el 20% menos que el año pasado.

En el primer semestre de este año se encontraban en construcción en Andalucía 61.000 viviendas libres, más de la mitad de ellas en Málaga, que se ha convertido en la primera provincia española en esta actividad, según datos del Consejo Superior del Consejo de Arquitectos.

Lógicamente la construcción es también el sector que más empleo genera, de forma que el paro registrado podría descender en torno a un punto y medio a lo largo del año. En el primer semestre del año el empleo en este sector ya aumentó un 9%. Y todo ello pese a que la licitación de obras públicas que realizan las administraciones descendió por encima del 20% entre enero y junio, según el informe de Analistas Económicos de Andalucía.

El segundo motor económico, los servicios, apunta también perspectivas muy favorables para los últimos meses del año, en especial debido al turismo, que experimentó una ralentización de su crecimiento en los meses de temporada alta.

El número de viajeros alojados en establecimientos hoteleros descendió hasta julio un 1,5%, pero podría crecer sobre el 2% en el cuarto trimestre.

El último informe de coyuntura de Analistas refleja que Málaga es la provincia con mayor crecimiento en la actividad (4,4%), seguida de Cádiz y Sevilla (2,9%). Y también que la galopada que la inflación ha experimentado en los últimos meses es la principal amenaza para la competitividad de la economía española.