Las placas solares más calientes y cálidas

Abel Martínez, de 35 años y natural de Torrellano (Baix Vinalopó), es el inventor del colector solar de cerámica, un artilugio que, según dice, permite un ahorro de energía eléctrica y de gas gracias a la optimización de la luz solar. La innovación de su invento, similar a las placas solares convencionales, radica en el material del que están construidas: cerámica líquida refractaria. Este componente permite a la placa alcanzar, durante las horas de exposición solar, una temperatura de 100 grados centígrados y generar calor durante al menos seis horas. La idea le surgió hace un año y medio, cuando un día cayó en la cuenta de que un recipiente de cerámica conservaba mucho más tiempo el café caliente que una taza de cristal. 'La naturaleza es una fuente de inspiración clave', dice. Entonces, Abel pensó en la posibilidad de innovar el material de las placas convencionales e introducir la cerámica. El funcionamiento del colector solar es similar al de un radiador. La placa, con unas dimensiones mínimas de dos por dos metros, contiene en su interior una telaraña de conductos por los que circula el agua que se vierte del depósito. Durante las horas solares, el colector absorbe el calor y lo transmite a las aguas que circulan en su interior, consiguiendo así agua caliente. Abel sostiene que el empleo de su colector solar permitiría un ahorro considerable de electricidad y gas, con el mismo coste y el mismo espacio. Su uso sería muy útil, añade, en hoteles, colegios, hospitales, particulares etcétera, ya que supondría un ahorro importante de dinero. Pese a la similitud de su invento con las placas convencionales, hay una ventaja considerable. Este colector solar es capaz de retener mucho más tiempo el calor y, por tanto, generar mayor energía. La razón es bien sencilla, asegura. Mientras las placas convencionales están fabricadas con materiales plásticos o de cobre, el colector está realizado en arcilla, un material, que se caracteriza por ser un mal conductor del calor. El cobre y el plástico, por el contrario, se enfrían cuando el sol desaparece. Así, durante la noche e, incluso, los días nublados su eficacia es prácticamente nula. En cambio, el colector de cerámica puede proporcionar agua caliente hasta seis horas después de desaparecer el sol. A su artilugio podrían dársele muchos usos, comenta Abel. Podría servir como calefactor, aire acondicionado y, sobre todo, como calentador de agua. Incluso, agrega, se podría utilizar para calentar determinados alimentos. Según sus indagaciones, las cerámicas líquidas pueden alcanzar una temperatura de 120 grados centígrados en verano, mientras que en invierno se mantienen en torno a los 100 grados. Las dimensiones necesarias del colector varían en función de la energía que se quiera obtener. Cuanto más energía, mayor número de colectores son necesarios. Este investigador, como a él le gusta que le denominen, recela de las administraciones, de los organismos y de la empresa privada en lo referente a las inversiones en nuevos proyectos. 'Aquí, en España nadie apuesta por la investigación'. Confía, sobremanera, en la eficacia de su creación, pero titubea cuando se le pregunta sobre su comercialización. 'Soy consciente de que implantar las instalaciones de energía alternativa es caro, y aquí nadie está por la labor', remarca. Con tan sólo estudios primarios, es un 'devorador' de libros de química. 'Teniendo nociones y fijándote en el día a día se te ocurren nuevas ideas', señala. Durante muchos años, trabajó en condiciones precarias en su vivienda de Torrellano, hasta que un empresario de su misma localidad, que prefiere mantener en el anonimato, creyó en él.

'Soy consciente de que implantar energías alternativas es caro y nadie está por la labor'

La confianza de este hombre ha permitido a Abel continuar con sus experimentos. Camionero de profesión, pero investigador por vocación, resta horas de sueño para cristalizar nuevas ideas. Entre sus creaciones más insólitas, figuran un sistema para reciclar el granito y permitir su reutilización. Abel Martínez se marchará a Extremadura para presentar su invento. La memoria de la nueva placa solar fue presentada en la Oficina Española de Patentes y Marcas del Ministerio de Ciencia y Tecnología el pasado mes de marzo.