Ruiz Gallardón hará 'alcaldes de distrito' si gana las elecciones

'El PP no hace promesas, firma contratos', dijo ayer el presidente de la Comunidad de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, durante su intervención en el XII congreso regional del partido. Y, a continuación, planteó el contrato que propondrá a los madrileños si gana las elecciones municipales de mayo de 2003: la 'tercera descentralización'. Esto es, no sólo lograr más poder para el Ayuntamiento, sino ceder competencias y financiación a los presidentes de las juntas municipales, que se convertirían así en 'auténticos alcaldes de distrito'. Ruiz-Gallardón arremetió además contra el anunciado pacto postelectoral entre PSOE e IU, recordando que esta última formación 'es socia de los nacionalistas del País Vasco'.

La segunda y última jornada del congreso regional del PP se inició con la proclamación, una vez más -y van cuatro desde 1993-, de Pío García-Escudero como máximo líder de los populares madrileños: le votó el 94% de los 1.925 compromisarios acreditados. Y concluyó con los discursos del vicepresidente segundo y ministro de Economía, Rodrigo Rato, y del presidente del Gobierno, José María Aznar, quien anunció su intención de comenzar la campaña electoral en cuanto su lesionado pie se lo permita.

Entremedias, las intervenciones de los candidatos populares para las próximas elecciones municipales y autonómicas, Alberto Ruiz-Gallardón y Esperanza Aguirre, respectivamente, acentuaron la importancia que para el Ejecutivo tiene la batalla por retener Madrid.

Prueba de ello fue el giro argumental que realizó Ruiz-Gallardón para criticar a sus adversarios políticos en la carrera electoral, 'un oponente confuso y con dos cabezas', dijo. Hace unos días, el candidato socialista a la presidencia de la Comunidad, Rafael Simancas, y su homólogo de Izquierda Unida, Fausto Fernández, anunciaron que, si ambas formaciones suman un diputado más que el PP tras los comicios de mayo, 'Madrid tendrá un gobierno progresista'; es decir, o gobernarán en coalición o el que menos votos obtenga (previsiblemente, IU) prestará sus votos al otro para que gobierne.

Ayer, Ruiz-Gallardón preguntó a los asistentes al congreso: '¿De verdad creéis que el pueblo de Madrid quiere ser gobernado por el mismo socio político [IU] que está sustentando al Ejecutivo nacionalista en el País Vasco?'.

Hasta hace poco, el presidente regional se había limitado a ignorar a sus oponentes o, incluso, a mostrar respeto personal y político por ellos. Ayer prefirió subrayar su condena a una coalición, Izquierda Unida, que representa, dijo, 'el sectarismo y la exclusión' en Euskadi, y arremeter de paso contra quienes estarían dispuestos a gobernar con ella en Madrid: los socialistas de Simancas.

Pero Ruiz-Gallardón no sólo habló de la carrera hasta las elecciones, sino que aprovechó para adelantar el que será uno de sus principales proyectos si las gana: la 'tercera descentralización' (que vendría a sumarse a los traspasos de competencias del Gobierno central al autonómico y, ahora en marcha, del autonómico al municipal).

'Vamos a hacer que, en todos los barrios de Madrid, el concejal sea un auténtico alcalde de distrito, cercano a los ciudadanos y dotado de aquellas competencias que le permitan resolver los problemas de los vecinos allí donde se producen', anunció. El presidente regional y candidato a alcalde no quiso concretar cuáles serían esas competencias, porque, según explicaron fuentes de la Comunidad, 'se trata de un proyecto que aún se está elaborando'. Pero aseguró que irían acompañadas por nuevas partidas presupuestarias que los presidentes de las 21 juntas municipales de Madrid gestionarían con autonomía.

El 'reto' de Aguirre

La presidenta del Senado y candidata por el PP para relevar a Ruiz-Gallardón, Esperanza Aguirre, repasó en su discurso los logros de aquél -aunque lo hizo empleando la primera persona del plural- y prometió afrontar con 'entusiasmo' el 'reto más difícil' de su carrera. 'El listón está altísimo, pero lo superaremos', sentenció.

Aguirre, que subió al estrado acompañada por gritos de '¡guapa!', también hizo campaña: aseguró que si gobierna se concentrará en 'los más desfavorecidos: las mujeres, los mayores y los jóvenes'. Además, apostó por la educación pública e hizo capítulo aparte de la inseguridad ciudadana: 'La sociedad no puede ser débil frente al delincuente', dijo. La senadora empezó y terminó agradeciendo el apoyo del PP a su candidatura, que será oficializada en los próximos días.

El respaldo del partido a Ruiz-Gallardón y a Esperanza Aguirre fue total: abandonaron la tribuna entre una cerrada ovación y con medio auditorio puesto en pie.