El servicio secreto español no tiene pruebas del rearme iraquí
El servicio secreto español no cree que haya conexiones entre la red terrorista Al Qaeda, responsable de los atentados del 11-S, y Sadam Husein. 'No parece muy obvia la relación entre un régimen laico y un grupo que se caracteriza por su fanatismo religioso', dijo ayer el director del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), Jorge Dezcallar.
En un seminario organizado por el Real Instituto Elcano, Dezcallar aseguró que se está produciendo una 'convergencia' de las posiciones de EE UU y Europa sobre Irak, que podría plasmarse en una resolución de la ONU.
La opción 'más sensata, pero no la más probable', afirmó, sería que Irak aceptara un regreso incondicional de los inspectores. En cambio, 'no sería válida' una respuesta que vinculase las inspecciones con el fin de las sanciones, como pretende Bagdad.
Esta actitud, pronosticó, abriría la puerta a una acción militar, 'unilateral o multilateral, con pruebas evidentes o sin ellas'. El CNI no duda de la 'clara' voluntad de Sadam de rearmarse, pero hasta ahora no dispone de pruebas de que oculte armas de destrucción masiva, como la mayoría de los países occidentales.
Respecto al permiso del Consejo de Seguridad para un ataque, recordó que algunos sectores de EE UU sostienen que hay una 'autorización genérica' desde la guerra del Golfo en 1991.