Monos en el escáner
La Guardia Civil halla a siete primates ocultos en la jaula de un perro en el aeropuerto
El guardia civil que en la mañana de ayer controlaba el sofisticado escáner del aeropuerto de Barajas tuvo que mirar dos veces la pantalla para creer lo que estaba viendo. En el monitor del aparato aparecían reflejadas las figuras de seis monos aplastados en el doble fondo de una jaula para perros. Y es que en este insólito compartimento, siete primates talapoin -uno de ellos murió por asfixia- viajaron en avión desde Malabo (capital de Guinea Ecuatorial) hasta Madrid durante seis horas.
La Guardia Civil los encontró al mediodía de ayer cuando, al sospechar de las despropocionadas dimensiones de la caja que transportaba a un perro, obligaron a su dueño a pasarla por el escáner. El propietario no fue detenido porque el valor de los animales no es suficiente como para considerar su transporte como un delito. Sólo constituye una falta administrativa cuya sanción tendrán que determinar los agentes de Aduanas, según fuentes de la Guardia Civil. Lo más probable es que los talapoin (unos primates muy activos y que rara vez superan el kilo de peso) estuvieran destinados a algún coleccionista privado de animales exóticos. Ahora los seis ejemplares que han sobrevivido al penoso viaje desde el golfo de Guinea descansan en un centro para su recuperación. Después, el Zoo de Madrid se encargará de su cuidado, según las mismas fuentes. La conservadora jefa del parque, Covadonga Talavera, explicó ayer que estos animales, originarios de África y Asia, son 'vulnerables' y podrían alcanzar un valor en el mercado negro cercano a los 3.000 euros.
No es muy común requisar animales vivos en Barajas. Según fuentes de la Guardia Civil, lo más normal es aprehender pieles, objetos de marfil y cráneos que se usan como elementos decorativos. En lo que va de año, los agentes aduaneros se han incautado de cuatro figuras y cinco colmillos de marfil en el aeropuerto; un cráneo de mono y otro de antílope, y una piel de lagarto. Las piezas de marfil son unas de las más codiciadas por los coleccionistas. Una cotorra, una tortuga y un lagarto son la fauna viva que la Guarda Civil ha encontrado en Barajas este año. En el resto de la región, los agentes han requisado cinco iguanas y dos loros en Alcorcón. Cuatro iguanas más en la capital, una piel de puma y un oso americano disecado expuestos en una feria, además de un halcón sabre, tres halcones híbridos y un halcón común. Todos ellos necesitan el permiso de las autoridades para ser importados. Cualquier persona que quiera importar o exportar un animal amenazado en nuestro país debe solicitar un permiso a la Secretaría General de Comercio Exterior, dependiente del Ministerio de Economía. Tanto el país receptor del animal, como el emisor, deben dar su visto bueno al viaje.
El transporte de animales protegidos está regulado por el Convenio Internacional de Especies Amenazadas de Flora y Fauna (CITES), en el que están recogidos los ejemplares incautados ayer en Barajas como 'especies que necesitan un control especial'.
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