_
_
_
_

Crece la oposición de los laboristas británicos a un ataque unilateral

La insatisfacción en las filas de los laboristas británicos ante un posible ataque a Irak es patente, según una encuesta publicada ayer por el diario The Times. De un centenar de líderes de sedes regionales -todas ellas en circunscripciones muy disputadas con los conservadores- consultados, tan sólo cinco declararon su apoyo incondicional a una ofensiva unilateral contra el régimen de Sadam Husein; el resto condicionó su respaldo a una justificación documental de la capacidad militar de Bagdad o a una nueva resolución del Consejo de Seguridad de la ONU.

Hacia la intervención del Consejo de Seguridad parece enfocarse la estrategia del primer ministro y líder de los laboristas, Tony Blair. Su todavía confidente y dimitido ministro, Peter Mandelson, apostó ayer por la vía de la ONU como aval de la acción militar contra Irak. En declaraciones a la BBC, Mandelson defendió que hay motivos para atacar Bagdad, pero advirtió de que una ofensiva unilateral sería 'una receta para el desastre' en Oriente Próximo. 'Como juez y jurado en este caso, la ONU debería ser el principal pilar en un mundo basado en la ley y en la cooperación internacional', defendió Mandelson.

Más información
Blair dice que su objetivo es desarmar a Sadam y no hacer una guerra contra Irak

Charles Kennedy, líder del Partido Liberal-Demócrata, la tercera fuerza política del Reino Unido, añadió ayer su voz a la corriente de opinión que se opone a una acción unilateral. Su reticencia a la participación del Reino Unido en una ofensiva estadounidense privará a Blair del consenso multipartidario que tiene garantizado en el liderazgo conservador.

'Pruebas claras'

Los liberales demócratas piden 'pruebas claras' que justifiquen un ataque unilateral y preventivo contra Irak por parte de Estados Unidos y con el apoyo del Reino Unido. 'Se debe demostrar que [Irak] está acumulando armas de destrucción masiva con la intención de utilizarlas', dijo su líder en declaraciones a la BBC. Y en un artículo de opinión publicado ayer en The Times, Kennedy recordó que aún no existen 'pruebas concretas' que relacionen el régimen de Bagdad con los atentados del 11 de septiembre.

'Sin algo definitivo que demuestre la conexión de Sadam Husein con el 11 de septiembre, o que demuestre que presenta una amenaza inmediata a la seguridad de nuestros aliados o a la nuestra, me resulta cada vez más difícil dar mi aprobación a un ataque preventivo contra Bagdad', escribe Kennedy.

El líder de la tercera fuerza política británica considera que todavía queda tiempo para presionar por vías diplomáticas y lograr que Sadam permita el regreso a Irak de los inspectores de armamento de Naciones Unidas. En este sentido, desacreditó la última sugerencia del Foreign Office encaminada a lanzar un ultimátum al presidente iraquí. 'No creo que fijar plazos políticos en este momento sea la postura correcta', criticó ayer en la BBC.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_