Mucho 'tomatl' para la piel
Un encuentro alaba las condiciones naturales de este fruto como antioxidante
Es probable que pocos de los que hoy acudan a Buñol a zambullirse en el zumo de tomate que los últimos jueves de agosto sazona esta localidad, sepan que además de descargar adrenalina a pozales mientras se descerrajan tomates maduros sin descanso, estén haciendo un favor a su piel. El tomatl, la llamada fruta hinchada por los aztecas -pese a sus usos culinarios como verdura es una fruta de la familia de las solanáceas- que se trajo Cristóbal Colón a principios del siglo XVI, es un poderoso antioxidante eficaz para evitar el envejecimiento de la piel. En ello tiene mucho que ver el licopeno, un compuesto muy abundante, especialmente en las pepitas.
Aprovechando la notoriedad de la tomatina, los laboratorios Ferrosán, celebraron un encuentro con periodistas de todo el mundo para presentar el Imedeen Time Perfection, un producto basado, en los beneficios del licopeno, que actúa contra las enzimas y los radicales libres que inciden sobre la salud de la piel. Expertos reunidos ayer en Valencia alabaron este compuesto y recomendaron su uso.
