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Reportaje:

Al quirófano por orden judicial

Un magistrado de Alicante autoriza la operación de un enfermo incapacitado para decidir y sin familia próxima

La ausencia de familiares cercanos de un enfermo ha propiciado una resolución pionera en la justicia española. Un juez de Alicante autorizó el jueves al equipo de neurocirugía del Hospital General de Alicante a realizar una operación de 'alto riesgo y peligrosidad' a un paciente de 47 años. El alcance de su enfermedad -padece un tumor cerebral benigno de ocho centímetros- le impide decidir por sí solo. El grave estado del enfermo y la imposibilidad de localizar a sus parientes obligó a los facultativos a reclamar la actuación del juez para que decidiera sobre una delicada intervención en la que, según explicaron los médicos al juez, el enfermo podría fallecer, o padecer graves secuelas tras su paso por el quirófano.

José Ricardo García Pérez, titular suplente del Juzgado de Primera Instancia número 9 de Alicante, fundamentó ayer su decisión, que calificó de 'pionera en la justicia española', en el derecho fundamental a la vida del enfermo.

Él paciente es un vecino de la localidad alicantina de Torrevieja llamado Manuel. Tras consultar al equipo de neurocirugía del centro hospitalario, el juez se vio obligado a tomar una decisión 'dramática'. Tenía que escoger entre dejar al paciente en su estado actual, lo que llevaría 'irreversiblemente' a la muerte tras un período de sufrimiento, o autorizar la intervención quirúrgica. Sin embargo, esta opción tampoco ofrece plenas garantías: las posibles complicaciones derivadas del paso por el quirófano le podrían llevar al enfermo a la muerte, según explicó el jefe de neurocirugía del Hospital General de Alicante, Fernando Ruiz García.

Tras sopesar la 'díficil' disyuntiva, José Ricardo García optó por aprobar la intervención. 'La operación garantiza mejor el derecho a una vida digna. Proyecta además una esperanza frente a la posibilidad de dejarle morir', dijo. Se trata de una decisión pionera, ya que, según José Ricardo García, estos casos no llegan hasta los tribunales. 'Habitualmente, la familia tiene la última palabra', puntualizó.

Manuel ingresó en estado grave en el Hospital General de Alicante hace dos semanas. El paciente presenta una psicosis orgánica con delirios, confusión en ocasiones y desorientación temporal y parcial. Su estado llevó al equipo de neurocirugía a consultar a los psiquiatras del centro sobre su capacidad de decisión. Los informes fueron concluyentes: el enfermo carece de capacidad para autorizar su propia intervención quirúrgica.

A la vista de la situación, los servicios sociales del hospital reclamaron la intervención judicial. El enfermo será operado el miércoles.

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