Sugerencias

En diciembre del año 2000 me dirigí a ustedes para hacer algunos comentarios sobre la habitual costumbre de fumar en la red de Metro de Madrid. Transcurrido más de un año y medio, he podido comprobar que no solamente se ha mantenido la costumbre de fumar en la red de Metro de Madrid, sino que cada día es mayor y más impune, porque lo compruebo a diario en las líneas 1 y 6 de la red, y esporádicamente en todas las demás líneas. Sólo voy a enumerar las que he sufrido en el día 9 de agosto de 2002, que ha sido como cualquier otro día:

1. Alrededor de las 7.10 de la mañana he llegado en un tren al andén de la línea 6, de la estación de Cuatro Caminos, y me he dirigido a hacer la conexión con la línea 1. En los cinco tramos de escaleras mecánicas, en el sentido contrario al mío, he podido contar a 12 personas diferentes que estaban fumando su cigarrillo. En el mismo sentido de las escaleras mecánicas, en las que yo iba, he tenido que soportar a dos personas que estaban delante de mí fumando sus dos cigarrillos tranquilamente, desde el andén de la línea 6 hasta el andén de la línea 1.

2. Cuando he llegado al andén principal de la estación de Cuatro Caminos (alrededor de las 7.15 de la mañana) he podido ver cómo había un guardia de seguridad (uniformado con camisa verde) que estaba en los tornos de entrada de la estación. Delante de él ha pasado un señor fumando y ni siquiera ha dirigido la mirada hacia él.

3. Cuando he llegado al andén de la línea 1 de la estación de Cuatro Caminos, en sentido a Plaza de Castilla (unos minutos más tarde), he podido ver como al igual que otros días había bastantes personas fumando en el andén, pero una de ellas estaba fumando cerca de otro guardia de seguridad.

Creo que lo mínimo es que se les advierta a todos de la prohibición de fumar en toda la red de Metro de Madrid.