El aumento del desempleo supone un revés para Schröder

La Oficina Federal de Empleo alemana publicó ayer los datos de paro en julio, que superan los cuatro millones de desempleados, casi el 10% de la población activa. Las cifras del paro se sitúan en valores similares a los que heredó el canciller Gerhard Schröder de su antecesor, el democristiano Helmut Kohl, y significan un duro revés para el candidato socialdemócrata en el arranque de la campaña electoral.

Los socialdemócratas gobiernan en coalición con los Verdes desde septiembre de 1998 y una de sus grandes promesas fue entonces rebajar la cifra de parados. A 45 días de las elecciones generales del 22 de septiembre, las cifras indican un aumento de desempleados en casi 95.000 con respecto al mes de junio pasado (un 0,2% más) y 250.000 más que el mismo periodo de 2001.

El jefe del Inem alemán, Florian Gerster, atribuyó este crecimiento a la estación estival: 'Muchos empresarios renuncian a contratar hasta final del verano y muchos jóvenes que terminan los estudios se inscriben en las oficinas de empleo'. Gerster declaró que no espera una mejora apreciable hasta finales de año. El aumento de julio ha sido significativo en los Estados de Brandeburgo y Mecklenburg (en el Este) y en Hamburgo y Baviera (Oeste). En este último land, donde gobierna Edmund Stoiber, el candidato a canciller de la Unión (CDU/CSU) ha crecido un 19,9% con respecto al mes anterior.

La falta de trabajo es un estigma en el este del país, la zona de la desaparecida República Democrática Alemana, desde que el país se reunificó en 1990. Un 18% de la población activa (un millón y medio de personas), según lo publicado ayer, no tiene hoy empleo en la zona oriental. Un porcentaje que representa el doble que en la occidental.

Reforma del mercado

La tasa de desempleo es asunto electoral desde hace meses. Los socialdemócratas convocaron en junio una comisión para reformar desde sus cimientos (las mismas oficinas de empleo) el mercado laboral alemán. En la llamada comisión Hartz, dirigida por Peter Hartz, directivo de Volkswagen, empresarios, sindicatos y expertos elaboran un proyecto, cuyas conclusiones serán presentadas dentro de 10 días. La comisión Hartz ha ido adelantando algunos de sus planes. Lo último: programas de inversión millonarios en el Este; empleos de baja retribución, incentivos para autónomos, premios por movilidad... La comisión Hartz pretende además privatizar el Instituto Federal de Empleo. La Unión, con Lothar Späth al mando, que puede ser futuro ministro de Economía si los democristianos ganan las elecciones, ha creado una contrarréplica: la llamada Ofensiva 02. Sus objetivos y propuestas pasan por el apoyo a las medianas y pequeñas empresas, la reducción de la burocracia y la reglamentación de las actividades empresariales.

La situación económica se tambalea desde el segundo semestre de 2001. Pero ayer el Ministerio de Finanzas aseguró que mantiene sus previsiones de crecimiento.