La Diputación vizcaína insiste en que el peaje será el mismo para toda la A-8

La Diputación de Vizcaya insistió ayer en que el futuro peaje de la autopista A-8, cuando en junio de 2003 termine la actual concesión privada, será 'idéntico' en todo el tramo, pese a que Guipúzcoa tiene previsto aprobar aprobar hoy un canon por kilómetro de siete céntimos por euro frente a los cinco -cerca de seis incluido el IVA- ya ratificados en abril en Vizcaya.

El titular vizcaíno de Obras Públicas y Transportes, José Félix Basozabal, suscribió las declaraciones del diputado general, Josu Bergara, quien el lunes auguró un 'acuerdo total' entre ambas diputaciones sobre este asunto. Añadió que las dos instituciones concretarán la gestión de la autopista, a cargo de una sociedad distinta en cada territorio, por medio de un convenio que deberá ser refrendado por las Juntas Generales de Vizcaya y Guipúzcoa.

Basozabal no se extendió sobre la intención de su departamento de compensar la diferencia de canones mediante una menor bonificación a los usuarios habituales vizcaínos frente a los guipuzcoanos. Sobre los conductores que utilizan esporádicamente la A-8, quienes no se beneficiarían de esta compensación, aseguró que el convenio bilateral debería incluir 'una tarifa común para los no habituales'.

En Guipúzcoa se van a aprobar descuentos, a partir de junio, entre el 25 y el 75%, según el número de viajes. Vizcaya no ha incluido estas rebajas en su acuerdo sobre el nuevo peaje. Ahora sus bonificaciones oscilan entre el 15 y el 33%.