La Bolsa cerró en mínimos

Los mercados han sufrido un nuevo ciclo de crisis de confianza que llevó a los principales índices a marcar mínimos del ejercicio. Las noticias sobre los resultados empresariales y los continuos amagos de escándalos financieros en la contabilidad volvieron a provocar fuertes caídas en la mayoría de los valores.

La Bolsa española vivió una semana marcada por pérdidas importantes y también por algunos rebotes técnicos. La historia de las últimas semanas se repite pero con pequeños matices. Es decir, elevada volatilidad siempre en zona de mínimos y con las noticias sobre los resultados de las grandes empresas o sobre rumores de nuevos escándalos contables como motor casi exclusivo de los mercados americanos y europeos.

El lunes pasado una apertura bajista de Wall Street llevaba a los índices europeos a sufrir un batacazo en toda regla que se saldó con la mayor caída del año en el caso del Ibex 35, y dejando al mercado español a niveles de noviembre de 1997 aunque con cierto consuelo ya que por ejemplo el índice londinense quedó a los precios de 1996. A todo esto, y tras una intervención de Alan Greenspan, presidente de la Reserva Federal, para tranquilizar a los inversores, la Bolsa de Nueva York recuperó gran parte de las fueres caídas iniciales que provocaron el hundimiento de las bolsas europeas. La jornada central del ciclo fue también Nueva York quién alimentó el cambio brusco al haber ganado casi un 5%, lo que permitió un festival alcista de consideración, hasta el punto de cosechar el Ibex la segunda mayor subida del año. El argumento no podía ser otro que los resultados del segundo trimestre de muchas multinacionales americanas que fueron mejores de lo previsto.

No duró demasiado la fortaleza de las compras y el viernes el mercado español volvía a las andadas con rebajas importantes en los indicadores. La renta variable ha entrado en una dinámica de movimientos bruscos que hace muy difícil la consecución de una mínima tendencia, por lo que la mayoría de las actuaciones de los inversores son con un especial componente del corto plazo. La situación económica, tanto en España como en el resto, no termina de definirse y los datos que se publican son contradictorios en muchos casos respecto de la recuperación. Aunque, al menos en lo que queda de julio, parece que los factores más determinantes para los mercados seguirán siendo los resultados del semestre en las empresas.

El último escándalo de AOL Time Warner o la intención de Ericsson de lanzar a bolsa acciones un 74% por debajo de su precio en el mercado, son factores que agravan más la crisis de confianza que invade a los seguidores cada vez más decepcionados de la renta variable.

El Ibex 35 registró el viernes la mayor caída del año y en la semana se anotó un descenso del 4,52%, mientras que el índice general de la Bolsa de Madrid bajó en el ciclo un 4,33%.