ETA asume la autoría de los atentados terroristas de la cumbre de Sevilla

La organización terrorista ETA asumió ayer los cinco atentados cometidos en varias ciudades españolas los días 21 y 22 del mes pasado con motivo de la cumbre de mandatarios que celebró la Unión Europea (UE) en Sevilla. ETA indica que el objetivo de esos atentados era golpear a los intereses económicos y turísticos. En el mismo comunicado, la banda armada se responsabiliza de otros cuatro atentados con coche bomba que se produjeron en el municipio vizcaíno de Getxo contra la burguesía de Neguri, contra la sede de Repsol en Madrid y contra la Universidad de Navarra en Pamplona.

En el comunicado, la organización terrorista reconoce la autoría de los cinco atentados cometidos 'en 30 horas', según precisa la nota, en Fuengirola, Marbella, Zaragoza, Mijas y Santander. Cuatro de ellos fueron realizados con coche-bomba y uno con paquete explosivo en lo que los terroristas definen como 'acciones contra intereses económicos y turísticos'.

ETA asume también la explosión de un coche bomba el 20 de abril en Getxo, presumiblemente a manos de los nuevos integrantes del comando Vizcaya, 'contra los ricos y políticos que oprimen a Euskal Herria'. La anterior acción del comando Vizcaya data del 28 de febrero, cuando intentó asesinar a la edil socialista de Portugalete Esther Cabezudo y a su escolta.

La colocación del coche bomba en Santander el 22 de junio y el hecho de que el vehículo fuera robado un día antes en la localidad vizcaína de Basauri alimenta la hipótesis de los investigadores de que los integrantes del comando Vizcaya tienen ya de nuevo dinamita para actuar.

ETA reivindica la colocación de los dos coches-bomba que explotaron en Madrid el 22 de abril en la sede de Repsol y el 1 de mayo en el edificio Torre Europa, frente al estadio Santiago Bernabéu, poco antes de la semifinal de la Champions League entre el Barcelona y Real Madrid. ETA considera que cometió estos atentados 'contra intereses económicos y turísticos' españoles.

Asimismo, ETA reconoce la autoría del atentado con coche-bomba del 23 de mayo cerca de la Universidad de Navarra en Pamplona, a la que califica de 'enemiga de Euskal Herria'. La banda asume igualmente el robo de dos troqueladoras y 250 placas de matrícula en Usurbil el pasado 13 de mayo.