ERC propone que la biblioteca provincial se instale en la vieja estación de cercanías

Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) planteó ayer una nueva vuelta de tuerca al debate sobre el futuro del ex mercado del Born. El diputado de ERC y senador Carles Bonet anunció que ha presentado una proposición no de ley en el Parlament en la que se insta al Gobierno catalán a que desestime definitivamente el Born como ubicación para la Biblioteca Provincial. También propone que ésta se ubique en la antigua estación de Cercanías de Renfe, situada en el mismo barrio.

Bonet considera que un buen espacio alternativo para situar la biblioteca sería la antigua estación de Cercanías de Renfe, situada detrás de la estación de Francia y que actualmente es un aparcamiento al aire libre con entrada frente a la escuela de Náutica. 'Es una gran posibilidad porque es un espacio de propiedad pública, porque permite la construcción y adaptación de la biblioteca sin el constreñimiento que suponía el Born, y porque está en el mismo barrio, a 150 metros del antiguo mercado', señala Bonet en su comunicado.

El parlamentario recuerda que numerosos historiadores y arquitectos han solicitado que se encuentre un espacio alternativo para la biblioteca y asegura: 'El único que se resiste a ello es el alcalde Clos, no sabemos bien en razón de qué argumentos'. Bonet ha realizado su propuesta de acuerdo con el grupo municipal de Barcelona y la permanente nacional de esta formación. El pasado 12 de mayo, ERC ya hizo público otro comunicado en el que consideraba 'poco respetuosa' con los restos arqueológicos la solución arquitectónica de cohabitación sobre la que están trabajando los arquitectos Enric Sòria y Rafael Cáceres, que es el planteamiento que, de momento, defienden las tres instituciones implicadas.

Reunión en Madrid

Ayer, precisamente, se celebró en Madrid una reunión tripartita con representantes del Ministerio de Educación y Cultura -que paga las obras de la biblioteca-, el Ayuntamiento de Barcelona -que ha cedido el Born para que se construya allí la biblioteca-, y la Generalitat de Cataluña, que gestionará el centro en el futuro.

De esta reunión no salió ningún acuerdo ni decisión sobre el futuro del Born. El encuentro, definido como 'fraternal' por un portavoz del ministerio, tenía por objeto analizar la documentación de la que se dispone de momento y conocer la visión de las distintas partes implicadas. También se decidió insistir en las medidas de seguridad del yacimiento y continuar trabajando en la hipótesis del estudio de cohabitación que realizan los arquitectos.

Esta propuesta de compatibilizar la conversión en museo del yacimiento y la biblioteca en el interior del ex mercado es lo que ERC quiere evitar, en concordancia con la opinión de diversas asociaciones de arqueólogos y otros profesionales del patrimonio. La nota señala: 'Los restos del Born tienen que ser considerados como un patrimonio histórico nacional y, por tanto, este espacio se debe convertir en un centro de interpretación de la memoria histórica de Barcelona y Cataluña'. La moción también considera que para prevenir problemas similares en el futuro 'se tendría que declarar todo el casco antiguo de Barcelona zona arqueológica'.