La fiscalía de Cataluña denuncia a los padres de cinco niñas magrebíes por no escolarizarlas

La fiscalía de Cataluña ha denunciado en los juzgados a cinco familias de origen magrebí de Olesa de Montserrat (Barcelona) por sacar a sus hijas del instituto después de tener la menstruación. El fiscal recuerda que la escolarización hasta los 16 años es una de las obligaciones que comporta el ejercicio de la patria potestad y por eso requiere a la justicia para que haga cambiar de actitud a los progenitores. La fiscalía anunció que si éstos persisten en su actitud, emprenderá acciones penales contra ellos por un delito de abandono de familia.

'No cabe privar a las mujeres de otra cultura del derecho a la educación, porque es un derecho tan importante como la alimentación o el alojamiento y porque, además, es una obligación que figura en el código de familia de Cataluña y en el Código Civil'. Con esta contundencia se expresó ayer el fiscal jefe de Cataluña, José María Mena, al anunciar la iniciativa de llevar este caso a los juzgados, una iniciativa sin precedentes en familias de origen magrebí. El propio Mena admitió que hace unos meses ya se habían planteado situaciones similares en otras ciudades catalanas y la fiscalía no había actuado. 'Hasta entonces no teníamos criterio, y ahora lo tenemos', sentenció.

Las denuncias contra las cinco familias se han presentado de manera separada y han sido admitidas a trámite por tres juzgados de primera instancia e instrucción de Martorell (Barcelona). Una de las denuncias de la fiscalía ha sido rechazada por un cuarto juez por una interpretación procesal discrepante, pero ya se ha recurrido contra esa decisión ante la Audiencia de Barcelona.

El fiscal Mena declinó ofrecer detalles sobre la situación familiar de las niñas, 'porque están protegidas por la ley', pero explicó que las menores tienen entre 12 y 15 años y, por tanto, están en edad de escolarización obligatoria. En todos los casos, la falta de asistencia al instituto se produjo tras la menstruación y algunas de las chicas tienen hermanos varones que siguen escolarizados sin ningún problema.

Los casos fueron detectados por los servicios sociales del Ayuntamiento de Olesa de Montserrat, que pidieron a los padres que las chicas siguiesen escolarizadas. Los progenitores argumentaron que eran las jóvenes las que habían decidido voluntariamente ausentarse del instituto, y fue entonces cuando el Ayuntamiento les ofreció todos los mecanismos a su disposición para velar por su escolarización. Pero la situación no varió y los responsables municipales acudieron entonces a la fiscalía.

Abandono de familia

Los juzgados han citado a declarar a los padres para la próxima semana con el objetivo de intentar que las jóvenes vuelvan al instituto. 'Si persisten en anteponer y mantener sus criterios culturales a nuestra igualdad ante la ley, actuaremos contra los padres por un delito de abandono de familia', aseguró el fiscal Mena. En este sentido recordó que la condena por un delito doloso, como sería éste, es un supuesto que recoge la vigente Ley de Extranjería para expulsar a un inmigrante. La fiscalía, sin embargo, no se plantea solicitar la retirada de la patria potestad. 'Eso sería romper la baraja y lo que tienen que hacer las chicas es seguir conviviendo con sus familias', aseguró el fiscal jefe.

Este caso se vincula a un dato constatado desde hace tiempo en España: la cifra de alumnas marroquíes cae en picado al llegar a secundaria. Las asociaciones que trabajan con el colectivo marroquí afirman que la razón del absentismo femenino es que las familias de inmigrantes no ven en la escuela una posibilidad de promoción socioeconómica para sus hijas y que prefieren, por tanto, que estén en casa ayudando a la madre o que se casen. En la Comunidad de Madrid, por ejemplo, el porcentaje de niñas marroquíes escolarizadas es del 45% en educación infantil (hasta seis años) y del 44% en primaria (de 6 a 12). Sin embargo, el porcentaje desciende en los institutos hasta el 35,8% entre 12 y 14 años.