Chaves e Ibarra exigen al Gobierno participar en la negociación de la reforma del subsidio agrario

Los presidentes de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves, y la Junta de Extremadura, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, las dos comunidades afectadas por la reforma del subsidio agrario que plantea el Gobierno central, manifestaron ayer de forma conjunta su rechazo a los planes del Ejecutivo y a su manera de abordar la cuestión. 'Hasta ahora, todos los cambios en el subsidio agrario han sido consensuados con los agentes sociales y los Gobiernos implicados', recordó Chaves quien, al igual que Rodríguez Ibarra, demandó la participación de los Ejecutivos autonómicos en la negociación de la reforma.

Rodríguez Ibarra planteó un escenario, -'la comisión general de comunidades autónomas del Senado'-, y una fórmula -'un debate abierto entre el presidente del Gobierno y los presidentes de la Junta de Andalucía y de la Junta de Extremadura'- para facilitar la participación de los Ejecutivos autonómicos en posibles cambios del subsidio agrario que cobran unos 230.000 jornaleros de ambas comunidades.

'El subsidio agrario y el Plan de Empleo Rural han evitado el éxodo rural a los núcleos urbanos y los problemas de marginación que eso hubiese podido producir', dijo Chaves en defensa del actual sistema. Y volvió a insistir en que la 'reforma impuesta' por el Ejecutivo central supondrá la eliminación, en el medio plazo, del subsidio.

Por su parte, el presidente extremeño recalcó el escaso gasto que supone a las arcas públicas 'el subsidio peor pagado de toda España'. Rodríguez Ibarra recordó que lo máximo que pueden cobrar los jornaleros incluidos en este sistema de protección son unos 1.862 euros al año (311.000 pesetas). '¿Alguien se puede creer que un jornalero rechace un empleo estable por cobrar esa porquería?', se preguntó el presidente de la Junta de Extremadura antes de lanzar una ráfaga de sarcasmo: 'En el Gobierno sólo conocen defraudadores fiscales, éstos no han visto un parado en su vida'.

Rodríguez Ibarra llevó al extremo el planteamiento de Chaves sobre un posible éxodo rural si el subsidio agrario desaparece. 'El Gobierno tiene que decidir si quiere que existan los pueblos rurales o quiere cerrarlos, eso es lo que está en discusión'. Y recordó que 'con José María Aznar en la presidencia, se cerraron 140 pueblos'. Los dos presidentes autonómicos retomaron su ofrecimiento de cogestionar los fondos del Plan de Empleo Rural para 'corresponsabilizarse de la gestión' de estas subvenciones.

Chaves y Rodríguez Ibarra realizaron estas declaraciones tras entrevistarse con los secretarios generales de UGT, Cándido Méndez, y CC OO, José María Fidalgo, con los que coincidieron 'plenamente' en su rechazo a la reforma laboral, y sobre todo, en la oposición a los cambios propuestos en el subsidio agrario.