Expertos del PSOE avalan el tipo único de IRPF con un recargo a las rentas altas

El grupo de expertos elegido por el PSOE para elaborar una alternativa de reforma del IRPF avala la propuesta de tipo único, con un recargo para las rentas altas, aunque no lo consideran la única posibilidad. La idea la lanzó el responsable socialista de Economía, Jordi Sevilla, y desató una fuerte polémica. El tipo central se situaría en torno al 23% y el recargo afectaría a rentas a partir de 30.000 euros. Además iguala las rentas de trabajo y las de capital.

Un resumen del documento fue distribuido ayer en la ejecutiva del PSOE, que dará su opinión a lo largo del año. Está elaborado por un grupo de expertos -elegido el pasado verano por el responsable de Economía del PSOE, Jordi Sevilla, y en el que están Antoni Castell, Miguel Cruz, Alberto Gago, Juan Antonio Garde, Juan Antonio Gimeno, José Antonio Herce, Rafael Iturriaga, Zenón Jiménez Ridruejo, Braulio Medel, Juan Romero, Jesús Ruiz-Huerta, Javier Ruiz Castillo, Julio Segura y Juan Zornoza-, y su principal cometido ha sido determinar si el tipo único, con un recargo a partir de un determinado nivel de renta, permite diseñar un IRPF más justo. Su respuesta es que sí, aunque no consideran que ésta sea la única posibilidad.

'Este núcleo básico [el tipo único más el recargo]', dice el informe, 'sería adaptable a otras fórmulas de tarifa alternativas, que proporcionan también mejores resultados en términos de igualdad, eficiencia y simplicidad, que los que se derivan del modelo actual y de la reforma en curso'. La presentación del informe coincide con los últimos toques al IRPF que entrará en vigor en 2003.

El informe de los expertos del PSOE no establece ese tipo único, ni el recargo, ni la cantidad a partir de la cual se aplicaría. Únicamente apunta que se situaría 'en el umbral' de los tipos efectivos [el porcentaje de impuestos que se paga sobre las rentas declaradas, después de deducciones] del impuesto de sociedades. Según datos de 1997 -últimos publicados-, el tipo efectivo del impuesto de sociedades es del 21,24%.

El porcentaje barajado para el tipo único está en torno al 23%, aunque la cifra exacta no se ha desvelado. Los expertos del PSOE han hecho diversas simulaciones con diferentes 'tipos únicos' y recargos, que tampoco se han hecho públicas. Según el documento, el recargo se aplicaría al 10% de contribuyentes con rentas más altas, que ahora son quienes ganan más de 30.000 euros al año.

Modelos diferentes

Los efectos económicos variarán mucho según donde se sitúen esos porcentajes, pero la propuesta deja claro que el modelo es muy diferente del que aplicó el Gobierno del PP en 1999 y desarrolla para 2003. El IRPF del PP se basa en el informe de otro grupo de expertos que llegó a conclusiones diametralmente opuestas. Rechazaron el tipo único -aunque su presidente, Manuel Lagares, lo defendió en el pasado-, por considerar que o anula la progresividad o es muy caro de aplicar.

La tarifa del nuevo IRPF que entrará en vigor en 2003 tendrá cinco tramos, con un tipo mínimo en el 15% y un máximo en el 45%. Si el tipo único del IRPF se situase en torno al 23%, los que ahora están en la parte baja de la escala pagarían más, y los de arriba, menos. Para estos últimos, la propuesta del PSOE contempla el recargo. Para los perjudicados, el efecto se corregiría con unas deducciones en la cuota que beneficiarían de forma inversamente proporcional al nivel de renta.

Frente al sistema actual de mínimos familiares y personales que se descuentan en la base del IRPF, los expertos del PSOE se inclinan por llevar esos descuentos a la cuota. La diferencia está en que una deducción en base produce un ahorro fiscal proporcionalmente superior cuanto más alta es la renta. En el caso de la Seguridad Social, por ejemplo, la deducción que ahora se practica en la base se aplicaría en la cuota en un porcentaje sobre lo que se ha cotizado.

La otra diferencia básica es cómo se forma la base. El IRPF del PP separa las rentas según sean del trabajo o del capital. Los salarios tributan según tarifa, mientras que las plusvalías lo harán el año próximo a un tipo único del 15%. Los socialistas plantean volver al sistema anterior, que integraría las rentas de trabajo y capital bajo una misma tarifa, con coeficientes reductores para las del capital en función del número de años.