Portugal reducirá a un solo canal el servicio público de televisión

El primer ministro portugués, el conservador José Manuel Durão Barroso, aseguró el pasado fin de semana en Coimbra que el nuevo Gobierno reducirá el servicio público de televisión a un solo canal de tipo generalista. Durão Barroso afirmó que 'no es aceptable que, cuando se piden sacrificios a los portugueses existan situaciones de despilfarro en el sector público'. En tono inflamador, aseguró: 'No vamos a permitir que se siga robando. ¡Esto tiene que acabar y va a acabar!'.

Así ratificó el primer ministro los planes del Gobierno para la Radio Televisión Portuguesa (RTP), cuyo anuncio, realizado el pasado jueves, ha desatado una crispada polémica nacional. El ministro de la Presidencia, Nuno Morais Sarmento, explicó, tras el Consejo de Ministros, que el Gobierno extinguirá la actual RTP para crear dentro de seis meses 'una nueva entidad' con un solo canal público y financiado con un presupuesto 'fijo, limitado y predimensionado'. El ministro no aclaró si el nuevo canal renunciará a la publicidad, como prometió el PSD en la campaña electoral, o podría restablecerse un impuesto específico como existía hasta 1991.

Morais Sarmento tampoco especificó si el segundo canal será privatizado o simplemente extinguido, como parece probable, dado que ahora no existe mercado publicitario para garantizar la rentabilidad de las dos cadenas privadas en abierto y la RTP-1 (la 2 hace tiempo que no tiene publicidad). El ministro insistió en que la reestructuración será realizada 'en diálogo con el mercado' y subrayó que el 'servicio público' no debe ser un objetivo exclusivo de la futura cadena del Estado, sino también de los privados. A juicio de algunos observadores, esta formulación abriría las puertas para que el nuevo ente produzca programas de servicio público que puedan ser emitidos por los privados.

Los planes del Gobierno han provocado las protestas de los partidos de izquierdas y del comité de trabajadores de la RTP, así como el lanzamiento de un manifiesto de intelectuales, políticos y periodistas que defienden el mantenimiento de los dos canales públicos.