'Crear 'Maus' fue como pasar una enfermedad', dice Art Spiegelman

En el cómic existe un antes y un después de Maus. Con esta crónica del holocausto, basada en testimonios de familiares directos, Art Spiegelman elevó la categoría de la historieta, medio considerado hasta entonces como mero entretenimiento evasivo, a obra literaria. El autor estadounidense llegó ayer a Barcelona como invitado especial del Salón del Cómic. Maus, que en 1992 obtuvo un Pulitzer especial, opta hoy al premio del certamen a la mejor obra extranjera con la edición completa que publicó el pasado año Planeta-De Agostini. Anteriormente, Norma Editorial y Muchnick Editores habían publicado la primera parte.

Spiegelman explicó ayer que el esfuerzo que realizó en las dos partes de Maus fue tan grande que le impidió realizar una tercera parte. 'Dibujar y escribir esta obra fue como pasar una enfermedad terminal a la que dediqué entre seis y ocho años de mi vida para cada una de las partes'. La historia de Maus la fue hilvanando con el relato del holocausto que le explicó su padre. 'Realmente, no entendía exactamente lo que hacía y murió antes de publicarse completa'. El cómic narra las visicitudes de su familia, parte de la cual pudo huir, pero otra sucumbió al terror nazi. Los judíos aparecen representados como ratones. 'El holocausto es un momento clave de la humanidad, pero se ha tendido a convertirlo en un hecho localista y parece que los judíos sólo tengan como interlocutores para hablar del tema a los alemanes, que es el otro pueblo al que le preocupa el genocidio'.

Spiegelman no se comporta como una estrella al uso. 'Para quitarme el jet-lag he preferido ir a visitar las exposiciones que irme al hotel', dijo. Lo primero que hizo al llegar a la Estación de Francia es visitar la exposición de los jóvenes autores ganadores del concurso que convoca el Instituto de la Juventud. Al lado mismo se exhibía una interesante exposición sobre Spiderman, de la que no quiso saber nada. 'En Nueva York recibo cada mes la revista El Víbora. La he leído desde el primer número, pero ahora quizás he perdido un poco de perspectiva de lo que hacen los autores españoles, por eso quería ver la exposición'.