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Ybarra y Uriarte salieron del BBVA como prejubilados, pero sin percibir indemnización

El ex presidente recibió una última aportación al fondo de pensiones de seis millones

Íñigo de Barrón

Tras el conocimiento de las cuentas secretas del BBV en paraísos fiscales, el 18 de diciembre pasado, Emilio Ybarra y Pedro Luis Uriarte, dejaron la presidencia y la vicepresidencia del BBVA. Ninguno de los dos ejecutivos recibieron indemnización por el abandono de sus funciones, ya que se marcharon como prejubilados. La última aportación que recibió Ybarra a su fondo de pensiones en el año 2001 fue de seis millones de euros (1.000 millones de pesetas) y 4,6 millones para Uriarte, cantidades que se suman a las recibidas en años anteriores.

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Los últimos días del año pasado fueron especialmente tensos en la planta 28ª de la sede madrileña del BBVA. El 5 de diciembre, Jaime Caruana, gobernador del Banco de España, le pidió por escrito a Emilio Ybarra, entonces copresidente del BBVA, la lista de los consejeros que tenían fondos de pensiones con cargo a las cuentas secretas. El día 10 de ese mes, el Banco de España recibe el escrito de Ybarra con la lista de nombres, pero sin las cantidades asignadas a cada uno de ellos. Después de 12 meses de investigación, esta negativa fue la gota que colmó el vaso de la paciencia de Francisco González, copresidente entonces y actual presidente único del BBVA.

Francisco González lanza un órdago: Ybarra y Uriarte deben abandonar el banco en el último consejo de administración del año, el del 18 de diciembre, 'para evitar que la tensión interna afectara al banco', según declaró el presidente ante el juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón. Después de no pocas discusiones, los dos directivos aceptan la situación y, rompiendo los acuerdo de fusión por primera vez, acuerdan que presentarán su renuncia en ese consejo.

Esta situación provocó que, a efectos laborales, Ybarra y Uriarte hayan pasado a formar parte de la legión de altos ejecutivos prejubilados en el BBVA en los últimos años. Por eso no han recibido ninguna indemnización salarial. En el caso de Ybarra, que este año cumplirá 66 años, el banco complementará la aportación de la Seguridad Social hasta alcanzar el 95% de su sueldo como presidente. Uriarte, que tiene 59 años, continuará con el 90% de sus salario hasta que cumpla los 65 años y luego se complementará con la Seguridad Social.

Última aportación

Al margen de los sueldos, como se refleja en la memoria de la entidad, en 2001 Ybarra y Uriarte sí recibieron una aportación al fondo de pensiones, que será la última.

En el caso de Emilio Ybarra, esta aportación ascendió a unos seis millones de euros (cerca de 1.000 millones de pesetas). A Pedro Luis Uriarte le correspondió una cantidad cercana a los 4,57 millones de euros (alrededor de 760 millones de pesetas). Estas cantidades se sumarán a las acumuladas durante todos los años de actividad en el banco de los dos ejecutivos.

En la memoria consta que en el ejercicio 2000 se dotó a los consejeros ejecutivos -que son Ybarra, Uriarte, González y José Maldonado, secretario del consejo- con 17,95 millones de euros como dotación a los fondos de pensiones. Al cierre del año 2001, después de que se hubieran marchado del banco Ybarra y Uriarte, la asignación se reduce a 7,37 millones de euros. La diferencia entre una cantidad y otra es la dotación al fondo de Emilio Ybarra y Pedro Luis Uriarte.

Además, la liquidación de la entidad incluyó una doble paga en el bonus del año para los dos ejecutivos salientes. Según consta en la memoria de la entidad, en el año 2000 se realizó una dotación por retribución variable de 3,17 millones de euros (527 millones de pesetas) para los cuatro consejeros ejecutivos, que pasó a 7,77 millones de euros (1.300 millones de pesetas) en 2001.

Este salto explica la cantidad que recibieron como doble bonus de salida Ybarra y Uriarte, ya que siguen siendo cuatro los consejeros ejecutivos. Esta práctica es habitual en el BBVA cuando se prejubila a miembros de la alta dirección, según ejecutivos consultados.

Amusátegui

Las cantidades que percibieron los ex ejecutivos del BBVA contrastan con las recibidas por José María Amusátegui, ex copresidente del banco Santander Central Hispano (SCH). José María Amusátegui recibió 43,75 millones de euros (unos 7.279 millones de pesetas) brutos tras dejar la copresidencia de la entidad, el pasado mes de agosto.

El pago se reflejó en la memoria correspondiente al ejercicio 2001 dentro del capítulo 'compromisos por pensiones de los miembros del consejo de administración, que desempeñan (o han desempeñado) funciones ejecutivas'. La memoria del banco, que ahora preside con carácter único Emilio Botín, especificó que los 43,75 millones de euros se pagaron 'con caracter extraordinario y no recurrente'.

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Sobre la firma

Íñigo de Barrón
Es corresponsal financiero de EL PAÍS y lleva casi dos décadas cubriendo la evolución del sistema bancario y las crisis que lo han transformado. Es autor de El hundimiento de la banca y en su cuenta de Twitter afirma que "saber de economía hace más fuertes a los ciudadanos". Antes trabajó en Expansión, Actualidad Económica, Europa Press y Deia.

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