Aznar advierte de que no admitirá 'retrasos' o 'apaños' en el consenso contra Batasuna

'¡Vamos a por vosotros!'. Enardecido por las aclamaciones de los más de 5.000 comensales congregados en la Feria de Valencia, el presidente del Gobierno, José María Aznar, apoyó ayer la tramitación urgente en el Congreso de la Ley de Partidos que pretende ilegalizar a Batasuna. Aznar se mostró dispuesto a alcanzar un amplio acuerdo con la oposición, pero sin que ello suponga retraso alguno en esta iniciativa. 'Quiero el máximo consenso, pero sin retrasos ni apaños políticos', dijo. El socialista José Luis Rodríguez Zapatero reclamó un 'tiempo razonable' para alcanzar el máximo consenso posible.

'Aquellos que quieran utilizar la democracia para acabar con la democracia, que quieran utilizar el Estado de derecho para acabar con las libertades, no lo van a tener fácil y pueden ser declarados fuera de la ley', añadió.

En respuesta al llamamiento al diálogo que el domingo le hizo el líder de la oposición, José Luis Rodríguez Zapatero, Aznar indicó que está dispuesto al mayor consenso posible, pero precisó que lo que no desea es que haya retrasos en la tramitación de la ley 'porque la sociedad española y la sociedad vasca no merecen retrasos'.

El jefe del Gobierno insistió en la necesidad de llegar lo antes posible al objetivo de ilegalizar a Batasuna y actuar 'con toda contundencia contra los terroristas, sus ayudantes y sus cómplices'. Añadió que él no se conforma con prácticas políticas que sólo permitan resistir, aunque sea con 'heroísmo', y advirtió a los terroristas y su entorno: 'Vamos a por vosotros, vamos a acabar con todos aquellos que practican el terrorismo en España'. 'Ningún demócrata debe tener miedo ni tiene que ir de puntillas ni con la cabeza baja', añadió Aznar, quien insistió en que no desea un 'apaño político para salir de la situación' porque es necesario 'que nos dejen vivir en paz y en democracia de una santa vez'.

Zapatero replicó: 'La Ley de Partidos debe ser una buena ley' y debe aprobarse 'en un tiempo razonable' para que salga adelante con el mayor consenso. 'Lógicamente', añadió el líder socialista, 'el tiempo que la razón dicte para que el diálogo y ese proceso de encuentro de posiciones se pueda producir'.

Aznar aprovechó su presencia en Valencia para visitar en Alzira el nuevo sistema de riego de 20.000 hectáreas de frutal, huerta y arrozal que se nutren de la Acequia Real del Júcar. Allí quiso dejar patente su larga memoria: 'No se nos puede olvidar que ha habido gente aquí, en este país, que quiso impedir en Bruselas que el dinero europeo previsto para el desarrollo del Plan Hidrológico Nacional llegase a España', dijo en alusión a una enmienda defendida en el Parlamento Europeo por la socialista valenciana Maruja Sornosa, que solicitaba una revisión de las ayudas al proyecto. 'Quiero que eso nadie lo olvide. Yo no lo voy a olvidar y lo recordaré siempre porque nunca se había llegado tan lejos ante una decisión soberana de las Cortes españolas'.