Más del 40% de los alumnos de 16 años, el doble de los previstos, estudia FP
Tienen más fácil el acceso al mundo laboral
La realidad ha superado las previsiones más optimistas. Durante este curso, entre el 40% y el 45% de los alumnos que acabaron cuarto de ESO, el final de la enseñanza secundaria obligatoria, se inclinaron por proseguir sus estudios en los ciclos de Formación Profesional (FP) en vez del Bachillerato. La cifra desborda por completo el cálculo elaborado en el mapa escolar dibujado hace ocho años, cuando se previó que el 20% de los alumnos optaría por la FP.
El resultado es que hay 31.000 alumnos estudiando el curso de grado medio de FP y 32.200 en el grado superior. 'Está claro que la percepción de la formación profesional ha cambiado y que ahora los estudiantes perciben que la opción de los ciclos formativos es una oportunidad muy buena porque salen perfectamente preparados para entrar en el mundo laboral', afirmó ayer Maria Rosa Fortuny, directora de Formación Profesional.
Una vez más, las cifras cantan: una encuesta externa a 600 alumnos que acabaron los ciclos de FP realizada el curso pasado indica que el 70% de ellos ya estaban trabajando. La encuesta se amplió al mundo empresarial y el resultado es que los patronos consideraron positiva la formación de los alumnos que finalizan estos ciclos. El 52% de las 423 empresas encuestadas estimaron suficiente su preparación y el 34% la calificaron de buena.
'Hay que pensar que estos estudios, además de adaptarse a los cambios y las necesidades del mercado, incluyen un importante volumen de horas de prácticas en empresas, por lo que cuando [los estudiantes] acaban, tienen un conocimiento muy aceptable de la realidad laboral', aseguró Fortuny.
Entre otros, los ciclos formativos tratan de las actividades agrarias, la electricidad, la electrónica o mecánica, la administración, las artes gráficas, el comercio o la mercadotecnia, así como, entre otras muchas opciones, la comunicación, imagen y sonido y las actividades físicas.
La consejera de Educación, Carme-Laura Gil, inauguró ayer el Salón de la Enseñanza (palacios 6 y 7 de la Fira de Barcelona) y Expodidáctica (palacios 4 y 5), que finalizan el próximo 21 de abril. En su decimotercera edición, y con 325 expositores, el salón de este año consagra gran parte de sus instalaciones precisamente a la formación profesional: 3.500 metros cuadrados han sido destinados a este sector de la educación. 'Este nuevo salón da una espléndida oportunidad a los jóvenes para pensar y analizar qué van a hacer con su futuro', declaró la consejera de Enseñanza.
Las previsiones señalan que pasarán por Montjuïc unas 80.000 personas, la inmesa mayoría jóvenes estudiantes.
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