Powell habla de 'progresos' hacia un alto el fuego

Colin Powell se reunió ayer por tercera vez con Ariel Sharon. El secretario de Estado norteamericano, a la salida de la residencia del primer ministro en Jerusalén, aseguró lacónicamente a la prensa que se estaban haciendo 'progresos' en el camino hacia un alto el fuego. Desde el bando palestino, las declaraciones de Powell fueron desmentidas categóricamente, al asegurar que 'no se puede hablar de avance si no hay antes un repliegue del Ejército israelí'.

'Creo que estamos en vías de realizar progresos y yo espero progresos en las próximas 24 horas', añadió Powell, aunque al mismo tiempo reconoció que este acuerdo inminente difícilmente supondrá un 'alto el fuego', dadas las discrepancias aún existentes entre israelíes y palestinos. Pero Powell no se desanima; hoy se reunirá por segunda y última vez con el presidente palestino, Yasir Arafat, en Ramala, para después viajar hasta El Cairo, donde se entrevistará con el presidente Hosni Mubarak y desde allí regresar a Washington.

La misión de pacificación de Powell no se ha acabado. Aunque los observadores diplomáticos aseguran que Powell regresará a la Casa Blanca con las manos vacías, no se descarta la posibilidad de que en un plazo de una semana el enviado especial Anthony Zinni o el director de la CIA, George Tenet, puedan regresar a la región para dar fe con su presencia de una firma de alto el fuego.

La ofensiva diplomática no parece hacer mella en la ofensiva militar, que ha cumplido su jornada número 18. Los tanques, ayer de madrugada, efectuaron una operación relámpago en Tulkarem, justo cuando se cumplía una semana de su salida, para llevar a término una redada en medios radicales. Los blindados también entraron nuevamente en el campo de refugiados de Akar, cerca de Nablús, donde un muchacho de 12 años resultó muerto por disparos del Ejército. Mientras, el Ejército establecía, por primera vez desde el inicio de la Intifada, un toque de queda sobre un sector de Jerusalén Este, sobre los barrios de árabes, situados a lo largo de la carretera que lleva a Ramala.