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Reportaje:

Doble rasero en el comercio mundial

Intermón Oxfam lanza una campaña para cambiar las reglas del mercado que asfixian a los países pobres

Por cada euro que el Norte envía al Sur como ayuda, los países pobres pierden dos, porque sus productos tienen que pagar gravosos aranceles para acceder al mercado de la UE y EE UU; en cambio el mundo desarrollado, por medio del Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional, exige que el Sur elimine toda barrera para los productos del Norte. Intermón Oxfam lanzó ayer la campaña Comercio con justicia en 20 grandes capitales del mundo (entre ellas, Madrid y Barcelona) para denunciar 'el doble rasero y la hipocresía de las políticas comerciales del mundo rico'.

'Con sólo que el Sur pudiese incrementar su participación en las exportaciones mundiales un 1%, saldrían de la pobreza 128 millones de personas', dice Ignasi Carreras, director de Intermón Oxfam. 'Ese 1% significaría, en África, cinco veces más que la suma de toda la ayuda oficial del Norte y la condonación de la deuda'.

El escritor Antonio Muñoz Molina elogió el informe de la campaña, titulado Cambiar las reglas: 'A través de datos y de historias personales, entendemos que tomar un café, comprar una camisa o encender el ordenador nos vinculan a un mundo globalizado donde se impone la liberalización a los pobres, pero los ricos se protegen. Un ejemplo: en España se protegió a las eléctricas con un billón de pesetas para que pudieran adaptarse a la competencia internacional, pero la UE cierra sus mercados a los productos del Sur'.

El máximo proteccionismo lo ejerce la UE, explicó José María Vera, del departamento de Estudios de Intermón Oxfam. 'Va a la cabeza del doble rasero, porque aporta ayuda, pero a la par, como también hace EE UU con el acero, subsidia con más de 1.000 millones de euros diarios su agricultura', dice Vera. 'Así se crea una sobreproducción y, al exportarla al Sur, rompe aquellos mercados. Nosotros no estamos contra los subsidios a la producción, a condición de que vayan a los pequeños agricultores y no a los latifundistas'.

Carreras se muestra convencido de que es posible cambiar las reglas del comercio sin perjudicar a economías como la española. 'Los políticos, cuando les planteamos lo del doble rasero, nos dicen que llevamos razón, pero que no pueden perder votos; pero el mundo, tal como está, es inviable, y el comercio puede funcionar de otra manera', señala. 'La campaña puede ser una bola de nieve de participación ciudadana'.

Los ciberactivistas pueden adherirse conectando con www.comercioconjusticia.com y enviando postales electrónicas ya diseñadas dirigidas a Aznar, como presidente de la UE y a su sucesor Anders Rasmussen, y a mandatarios como Bush, Koizumi, Mbeki o Chávez.

Dos actores escenifican <b></b><i>Las reglas del comercio mundial</i> en la Puerta del Sol de Madrid.
Dos actores escenifican Las reglas del comercio mundial en la Puerta del Sol de Madrid.RICARDO GUTIÉRREZ

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