Jodie Foster encara el terror en su nuevo filme
'La habitación del pánico' es para la actriz una metáfora del divorcio.
Jodie Foster es cautelosa al sacar conclusiones fáciles de esa abundante parte de su carrera en la que sus papeles siempre incluían el detalle de estar 'abandonada por su padre'. Sin embargo, David Fincher, realizador de su último estreno, La habitación del pánico, no ve coincidencias en que sus últimos trabajos sean mucho más maternales. 'Creció interpretando a la hija de madres solteras y ahora ella interpreta los papeles de esas madres solteras', asegura. Ése al menos es su papel en La habitación del pánico: Meg Altman, recién divorciada, que debe de defender su vida y la de su hija (interpretada por Kristen Stewart) de unos ladrones que han invadido su nuevo hogar. 'Para mí, lo más interesante ha sido ver el filme como una metáfora de un divorcio. Como decía Fincher, la destrucción del hogar durante la lucha por la custodia entre sus dueñas y los asaltantes', analiza Foster sobre su nuevo estreno.
A sus 39 años, la actriz ha logrado mucho más que muchos otros compañeros de profesión. Candidata al Oscar a los 14 años por Taxi Driver, ganadora de la estatuilla en dos ocasiones -con Acosados y El silencio de los corderos- cuando estaba en la veintena y metida a directora (El pequeño Tate y A casa por vacaciones) en la treintena. Una notoriedad que, como reconoce, nunca ha ido buscando y que, metida en la industria del espectáculo desde que enseñó el culo en los anuncios de Coppertone a los tres años, la ha rodeado 'antes de saber lo que era la fama'. Además, está el atentado que cometió John Hinckley Jr. contra el entonces presidente Ronald Reagan supuestamente para impresionarla y el enigma que rodea su vida, en medio de continuos rumores sobre su sexualidad y con dos hijos de los que es madre soltera y de quienes nunca ha querido confesar ni el nombre del padre ni la forma de concepción.
No es de extrañar la lectura intelectual de Foster de un filme que es principalmente una historia de acción y suspense. Convencida de que es alguien que sabe 'mantener la calma incluso en situaciones de pánico', su atracción por el género deriva de esta afirmación, deseosa de vivir el riesgo de la manera más segura. 'He hecho pocas películas que requieran tanta forma física y dado que soy alguien a quien le encanta el deporte deseaba algo así, lleno de acción'.
Babelia
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