¡Hordas bolivarianas!

A los venezolanos no tienen ya que venirles con cuentos sobre la brutalidad y agresión de los mal llamados círculos bolivarianos, que hacen un flaco servicio a nuestro Libertador, Simón Bolívar, porque el haber asignado con su nombre a esos grupetes es una ofensa al Padre de la Patria. (...) Pudimos ver en la televisión cómo esas hordas bolivarianas dotadas de armas blancas, piedras y palos, (...) ante la mirada complaciente de efectivos de la Guardia Nacional, agredían impunemente a grupos opositores. (...) Nunca se evidenció tanto la presencia de esos terroristas, copias al carbón de los comandos de defensa de la revolución cubana, como ayer pudo ver todo el país, agrediendo lo que hallaran por delante, así fuesen mujeres, niños o ancianos. No les importaba. Eran miradas inyectadas de odio, agresivas, violentas. (...)

Las hordas bolivarianas (...) fueron a provocar violencia a las puertas de la CTV y de Fedecámaras, atacaron a otros disidentes cerca del Palacio Legislativo y a una protesta pacífica que se hacía frente al Canal 8 por las abusivas y tergiversoras cadenas gubernamentales. (...)

Desde el momento que se anunció la creación de esos círculos (...), se trató de presentarlos como sectores sociales que velarían por la seguridad de los habitantes de los barrios. Mentiras, como se sabía, y Venezuela toda pudo verlos ayer en acción a través de los diferentes canales de televisión independientes.

La libertad y la democracia es (...) un derecho que este Gobierno, ni ningún otro, arrebatará a la sociedad venezolana.

Caracas, 10 de abril